Miles de manifestantes desfilan este lunes 16 de enero en la capital, Lima, donde el estado de emergencia acaba de prorrogarse 30 días. La represión policial ha dejado al menos 42 muertos desde el inicio de la protesta, desencadenada por la destitución y detención del presidente izquierdista Pedro Castillo. La CIDH estima que ha habido “un uso excesivo de la fuerza” por parte de las autoridades.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizó una visita a Perú para observar la situación de derechos humanos en el marco de la crisis institucional y de las protestas sociales que se desarrollan desde los primeros días diciembre del 2022. La visita se llevó a cabo del 11 al 13 de enero en varios lugares del país andino.
“Hemos condenado todo acto de violencia, nuestra preocupación es que haya focos de violencia que pretendan desnaturalizar la protesta pacífica y le hemos recordado al Estado que frente a la violencia debe actuar con los principios de legalidad y de proporcionalidad», afirma a RFI el guatemalteco Stuardo Ralón, primer vicepresidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Si bien aún está por redactarse el informe, Stuardo Ralón asegura que la CIDH va a proponerse para acompañar la investigación sobre los asesinatos ocurridos durante las manifestaciones. «Es fundamental esclarecer qué ocurrió y sancionar a los responsables», explica.
El sábado se decretó un nuevo estado de emergencia. Esta medida estará en vigor durante 30 días. Autoriza al ejército a intervenir para mantener el orden y conlleva la suspensión de varios derechos constitucionales, como la libertad de circulación y reunión y la inviolabilidad del domicilio, según un decreto publicado el sábado por la noche en el boletín oficial.
Además de la capital, están sujetos al estado de emergencia los departamentos de Cusco y Puno, así como el puerto de Callao, cerca de Lima.
A pesar de todo, miles de manifestantes ya están convergiendo hacia Lima, comunidades aymaras y quechuas así como también organizaciones sociales y sindicales de varias zonas del país llegarán entre este lunes y martes a la capital peruana para pedir la destitución de la actual presidenta Dina Boluarte.