Acarigua.- Cada 4 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Salud Sexual. Desde 2010, la Asociación Mundial para la Salud Sexual (AMSS), estableció esta fecha para «sensibilizar y promover la sexualidad como un aspecto esencial del ser humano y un elemento de la salud reproductiva que debe ser satisfactorio, saludable y sin riesgos para la población«.
Aunque en el artículo 50 de la Ley Orgánica para la Protección de los Niños, Niñas y Adolescentes (Lopnna) sobre la salud sexual y reproductiva, señala que “todos los niños y adolescentes tienen derecho a ser informados y educados, de acuerdo a su desarrollo, en salud sexual y reproductiva para una conducta sexual y una maternidad y paternidad responsable, sana, voluntaria y sin riesgos”, la educación en cuanto a este tema no se está ejecutando de manera formal.
Así lo indica en un artículo el Programa Venezolano de Educación Acción en Derechos Humanos (Provea), en entrevista realizada a Mercedes Muñoz, profesora de Orientación Psicoeducativa en Sexualidad en la Universidad Central de Venezuela (UCV) y presidenta de la junta directiva de la Asociación Venezolana para una Educación Sexual Alternativa (Avesa), explicando que la educación que existe es moralista, “plantada sobre valores y concepciones de lo que es la sexualidad, la reproducción; de lo que es ser hombre y mujer, perpetuando una estructura social que ha existido desde hace mucho tiempo y que llamamos patriarcal y machista, donde no hay igualdad de derechos».
El artículo aborda el tema desde la concepción con la que fue creado el Día Mundial de la Salud Sexual, que se celebra cada 04 de septiembre.
También se pone de manifiesto que en Venezuela existe uno de los más altos índices de mortalidad materna de la región y el más alto de embarazo adolescente en Sudamérica. Igualmente, estamos en el tercer lugar de embarazos adolescentes de todo el continente, detrás de Nicaragua y Honduras.
Al ser la Educación Sexual Integral (ESI) un tema de salud pública y de derechos, la única manera en que se puede abordar es educando a niños, niñas y adolescentes, para que conozcan de la sexualidad, cómo se pueden cuidar y que puedan tomar decisiones conscientes.
– La ESI tiene que ver con la salud, con la identidad, con el bienestar, con nuestra condición de seres humanos. La sexualidad nos define como seres humanos y, por lo tanto, debe educarse sobre eso, indicó la presidenta de la Avesa.
Avesa es una institución pionera en este tema. Por eso, nos llamamos Asociación Venezolana para una Educación Sexual Alternativa, trabajando desde hace casi 40 años.
Durante ese tiempo, ha apoyado a casi 16.000 personas en atención psicológica, víctimas de violencia sexual, y es una organización con un conocimiento amplio y profundo del problema. Desde esa perspectiva, ha participado en la discusión, propuesta, lobby, divulgación, educación y capacitación en el tema de violencia sexual y con temas de educación sexual, que la ha llamado “alternativa”, porque es una alternativa a la educación sexual moralista.
El artículo destaca la casi nula información en las escuelas y la desinformación que tienen los adolescentes.
Asimismo, señala que el objetivo de la ESI es enseñarles a ellos cómo comprender, cuidar, decidir, disfrutar y prevenir situaciones en nuestros cuerpos y su contenido debe ser progresivo, ya que no es el mismo que debería darse a niños y niñas que a adolescentes.
Explica, además, cómo en los planteles educativos la opinión está actualmente polarizada. Algunos lo ven como una aberración. Los mismos compañeros no lo entienden completamente, pero al mismo tiempo algunos reconocen casos donde se pudo haber evitado o emitido señales de alarma.
En los sectores populares, el acceso a la ESI es importante para promover la igualdad de género y para lo sexodiverso, además de aprender sobre el respeto de las diversas orientaciones sexuales y romper con patrones patriarcales, como que una mujer que no es madre es una persona incompleta, y el acceso real a anticonceptivos para maternidades y paternidades deseadas.
La Educación Sexual Integral, nos puede ayudar a comprender todos estos temas y proteger a los niños, niñas y adolescentes.
Fuente: Prensa Provea