Acarigua.- 18 mil hectáreas de soya serán cultivadas este año en oriente, específicamente en Anzoátegui y Monagas, estados que junto a Guárico y Portuguesa, siguen sembrando, aunque no en la cantidad requerida para abastecer la demanda nacional, en un país que dispone de 2 millones de ha con potencial para este rubro.
Lograr la continuidad de la siembra en esta leguminosa, no ha sido fácil en los últimos años, tomando en cuenta -y en opinión de los propios agricultores-, las erradas políticas oficiales y un control de precios, que han llevado el fracaso de la producción de soya, al igual que el girasol, oleaginosa que probablemente vuelva a los campos este 2022 tras un “respiro” en la economía nacional.
Otro factor que impide el repunte de la siembra de soya, es la poca producción de semilla y variedades que sumen a la productividad, por lo que, a juicio de Hernan Torres, vocero del «Polosojero», se debe permitir el cultivo de transgénicos, para garantizar mayor superficie y rendimientos.
«A partir del 2018, se han dado varios intentos de desarrollo de soya, tanto en Portuguesa como en el oriente del país; lamentablemente en algunas zonas no ha prosperado, pero si no se permite la siembra de soya transgénica es muy difícil que aumente la superficie, por lo costoso de producir soya convencional», alegó el productor.
A pesar de las caídas y tropiezos, los esfuerzos continúan y para este año, la siembra iniciaría en junio y otra parte en agosto, en unas 200 ha para Guárico y 1.000 ha para Portuguesa, donde también establecerán algunos ensayos.
Ante la poca producción de soya, los cálculos de «Polosojero», -empresa de asesoramiento en cultivos extensivos-, arrojan una importación aproximada de 80.000 toneladas en grano, 300.000 tons en harina o torta, y 200.000 tons en aceites y grasas
«Es lo mínimo que importa la agroindustria en granos, harina y aceite, y que se utiliza para la producción comestible y para la industria de alimentos balanceados para animales», dijo.
La soya es una de las principales plantas oleaginosas del mundo, ubicada entre los primeros cultivos como fuente de aceite vegetal para consumo humano, siendo el contenido de aceite en su grano de 17 a 20 %. Además, gracias a su elevado contenido de proteína, que puede superar el 35 %, es la mayor fuente de este componente en la formulación de los alimentos balanceados para animales (ABA). (Mireya Mireya Moya)