Araure.- Es frecuente verla entre los actores principales de la política nacional. Destaca por su juventud, verbo fácil, actitud de líder y opiniones inteligentes. Poco se suele hablar de los rasgos de personalidad y del grado de calificación de los que rigen o pretenden dirigir un estado, pero ella no se pierde entre la multitud.
El relevo en cualquier área es de suma importancia y cuando se trata de gobernar el destino de los millones de seres que formamos un país, que llenamos y damos vida a esa palabra pequeñita que tiene un significado gigante, entonces, el remplazo adecuado, con preparación sociopolítica, con sensibilidad y cultura suficiente, es indispensable.
Ella es María Gabriela Arocha, defensora de Derechos Humanos, licenciada en Administración de Empresas, TSU en informática y comerciante. Además, es cantante coral, actriz de teatro y actualmente dedicada a la política.
Un rasgo muy importante, el de ser músico, porque se sabe que las orientaciones culturales parecen ser esenciales para la estabilidad, la profundidad y la calidad del sistema, tanto como pueden serlo las cuestiones económicas y sociales.
Los recuerdos
Nació en Acarigua hace un poco más de 4 décadas, y siempre ha vivido y estudiado en Portuguesa. Su juventud estuvo dedicada al arte entre luces y camerinos, porque fue miembro de diversas agrupaciones culturales.
Ha practicado el canto coral, formó parte de Cuatros y Voces de Portuguesa, recientemente del Coro Sinfónico de los Llanos perteneciente a «El Sistema» e hizo teatro. Fue guía scout en el grupo Batalla de Araure por años y con esas disciplinas recorrió el país y representó a Venezuela en otras latitudes. De esa época conserva hermosos recuerdos y fraternales amistades.
«Soy egresada de la UPT J.J. Montilla, un recinto que fue mi inspiración porque crecí en las instalaciones del Tecnológico ‘Eustacio Guevara’, institución en la que mi papá trabajó por más de 35 años; recuerdo que me encantaba acompañarlo a su oficina. Considero la administración la base de absolutamente todo. Sin embargo, soy comerciante por naturaleza, amo las ventas y desde muy pequeña aprendí a tejer y a hacer colitas para venderlas a mis amiguitas en el ‘Palacio Fajardo'», nos relata, aunque formalmente comenzó a trabajar a los 17 años.
De la música a la política
Para ella, la política es servicio, compromiso, disciplina y dedicación. Antes de entrar en ese mundo, participó, por iniciativa propia, en diversas actividades relacionadas con la defensa de los DDHH, pero fue desde una reunión a la que la invitaron, hace cinco años, cuando se sintió «llamada».
«Es que nací para hacer política, servir y contribuir en la organización de una nueva manera de ejercerla. Por ello, soy fundadora de ‘Encuentro Ciudadano’, la que considero mi otra familia», aseguró.
-El ambiente para una mujer en política es bastante complejo, definitivamente no es para débiles. Sin embargo, me he mantenido con firmeza porque sé que somos la voz de muchos que han sido silenciados, no puedo quedarme callada frente a injusticias y la manera que considero adecuada es propiciar espacios para fortalecer el camino», dijo al respecto de su participación.
Está convencida que eligió la mejor manera de realizar los cambios que necesita la sociedad desde el núcleo, a partir del origen del problema, conquistando espacios de poder para impulsarlos.
Preparación
Una de las cosas de las que adolece la mayoría de los dirigentes venezolanos actuales, es la preparación en el área. Arocha ha hecho hincapié en este sentido. Es egresada de la segunda cohorte de la Escuela de Gobierno «Mercedes Pulido«, en Caracas, y ha realizado distintos diplomados de la Universidad Católica Andrés Bello.
«Entre mis cualidades considero la oratoria una fortaleza, así como el manejo de equipos de alto desempeño. Sin embargo, la que considero más importante de todas, en el ejercicio, es la empatía, mantener vivo el deseo de ayudar a mucha gente que nos necesita, manteniendo siempre los pies en la tierra», enfatizó.
El futuro
Ella, por supuesto, tiene planes claros y definidos y, como debe ser, estudia y se prepara como todo aquel que aspira lograr una meta alta y dice, sin titubeos, que aspira un cargo de poder desde el que está segura que puede generar importantes cambios. «Soy una mujer de grandes retos y procuro siempre rodearme de los mejores para lograr los objetivos».
Como filosofía de vida, cree firmemente que vinimos al mundo a ser felices y que el maestro aparece cuando el alumno está preparado. Esta pudiera ser una metáfora con respecto al tipo de liderazgo que los pueblos eligen y que, está comprobado, es acorde con su nivel de educación, información y aspiración.
«Nací para servir y me he propuesto formarme y tomar acciones para hacer del mundo un lugar mejor, pues al trascender quedará lo que hemos sembrado con amor en el mundo, cada ser humano es un potencial agente de cambio, solo debemos conectar con nuestro ser y estar claros de que todas las respuestas se encuentra dentro de nosotros», expresó.
Familia
Es una mujer muy joven que comparte su vida y actividad profesional con una hermosa familia. Tiene 12 años con su esposo Jairo, de quien -dice- es su mano derecha y mayor apoyo.
«Tenemos un hijo de 10 años, Damián Alejandro. Es un niño muy alegre e inteligente y la luz de mis ojos. También tenemos un hijo perruno de 3 años, un noble y cariñoso mestizo llamado Rock Antonio. Ha sido posible fusionar ambos roles porque mi esposo también pertenece a nuestra organización política. Juntos siempre porque estamos conscientes de los riesgos asociados a hacer política en Venezuela», indicó.
Le gusta
Leer es una de sus pasiones y el escritor que más ha impactado su vida es Jhon Maxwell: «Si nadie es tu mentor, los libros esperan por ti para serlo«, citó.
«Inicié a los 6 años en el mundo cultural en nuestro estado, entre ellos, Cuatros y Voces de Portuguesa y el Coro Sinfónico de los Llanos. Con este último, canté música clásica. Soy mezzo soprano y desarrollamos obras como ‘Gloria’ de Vivaldi, ‘Requiem’ de Mozart, ‘Cantata Criolla’, ‘El canto de los bosques’, así como obras del folklore nacional. Con estas agrupaciones recorrí Venezuela. También hice teatro y una de las actividades que más disfruto y realizo a diario, es la meditación», señaló.
Mujer y política
«La figura de la mujer en la política ha ido tomando mucha fuerza, por el valioso trabajo de tantas féminas que se han dado a la tarea de hacer que el mundo escuche la voz que por siglos estuvo reprimida. No es una tarea sencilla la de una mujer en política, ser madre, esposa, crecer profesionalmente y dirigir una organización en un mundo lleno de machismo. Veo a corto plazo muchas mujeres ocupando importantes cargos de poder e inspirando a que muchas más se sumen, para promover cambios de impacto para todas las generaciones», reflexionó.
Mensaje
«Lo más importante para todos es que vivamos intensamente el aquí y ahora, sembrando en cada paso el legado que queremos dejar a la humanidad», acotó. (CNP 16.100)