Araure.- Para la psicólogo Rosmary Chirinos, la Navidad puede alcanzar un coste emocional muy alto para las personas, porque hay quienes disfrutan mucho estas fechas y otras que no.
“Navidad es, sin duda, una época especial en el año. Cuando sentimos que llega diciembre, el cuerpo se convierte en una explosión de emociones y la mirada se pierde en pensamientos. A nivel psicológico, pueden considerarse varios escenarios: hay personas que adoran estas fechas, las disfrutan, y a otros que no.
Explicó que se pueden asociar estas fechas con muchos factores que les gusta y que no, porque generan emociones, ya sea por situaciones personales, sociales, recuerdos, vivencias y creencias, entre otras, que traen ese alto coste emocional.
Para tratar de entender lo que ocurre, Chirinos expresó que «las emociones son reacciones orgánicas psico-fisiológicas espontáneas y automáticas, mientras que el sentimiento es relacionado con la percepción o interpretación mental e individual de esa emoción»
En este contexto, indicó que todas las personas pueden elegir el tiempo que desean que esa emoción se prolongue en la mente y en los pensamientos. Dijo, además, que los individuos son capaces -a través de esos pensamientos- de regular esas emociones.
Recomendó, en primer lugar, identificar cómo se siente la persona en esta época, para determinar si le gusta, no le gusta y por qué, ya que esos sobresaltos navideños pueden impedir disfrutar de estos días.
Chirinos pidió a las personas que se conecten con la vida, con lo real y lo placentero. «La Navidad invita a vivir desde tu esencia», subrayó.
Entre las sugerencias para que estos días no se conviertan en malos momentos, pidió que las personas busquen conectar con ese tiempo y espacio para reencontrarse, «hacer una pausa y reflexionar, hacerse consciente de lo positivo y lo negativo que habita dentro de uno y, si considera que hay que hacer un stop, cambiar de ritmo y rumbo; es momento de hacerlo».
«Es importante enfocarse en lo positivo, en un sueño, conectar en el hoy y buscar sumar a su vida»prosiguió.
También dijo que es necesario que se suelte el sobreesfuerzo físico y metal. «Libérate de las expectativas de la época navideñas de esos preparativos y de los compromisos y enfócate en tu perspectiva, en lo que quieres sentir, vivir saborear y conectar; hay la oportunidad de sacar ese niño interior y dejarlo vivir este momento», aconsejó.
Asimismo, considera importante dejar y permitirse abrazar el vínculo familiar, porque esta época habla de la familia desde el nacimiento de Jesús y hay que estar conscientes de que existen núcleos funcionales y disfuncionales, pero hay que aprender a reconocerlos.
Chirinos destacó que si hay duelo o enfermedad, «recuerda que por más ganas de huir, hay un corazón que late y hay dos emociones presentes en el ser durante la Navidad ‘ilusión y esperanza'».
Finalizó, invitando a conectar y recuperar las tradiciones que llevan a abrazar a ese ser que está al lado y que hoy se llama familia. «Son personas que aprecian verte feliz (…) Conecta con tu esencia, deja florecer la magia de la Navidad en tu corazón y, por último, escribe un propósito o intención personal, y un deseo de Navidad y haz que suceda». (CNP 13.114)