Araure.- «Los abrazos son fuente de salud y tienen una acción terapéutica potente». Así lo expresó la psicólogo Carla Alfonso, al referirse a la importancia del contacto entre los seres humanos.
-El abrazo es la expresión y actuación de una emoción (caricia), validación cuando hay un sentimiento y mediante el cual consideramos al semejante digno de nuestra atención y reconocimiento en su esencia y humanidad, así como merecedor de nuestro afecto, alegría o placer.
Este 21 de enero, se celebra el Día Internacional del Abrazo, como una respuesta a la solicitud que en los años 1980 hizo el pastor y psicólogo Kevin Zaborney, en Estados Unidos. Desde entonces, se ha convertido en una jornada que muestra «el poder terapéutico y emocional de este gesto tan simple, pero profundamente significativo» como lo reseña el Diario La Nación.
Alfonso explicó que el sentimiento de abrazarnos con amor, puede ser parental, filial, fraternal, de pareja o amistoso y, al hacerlo, logramos una vinculación-adaptación al entorno y nos preparamos para la acción que involucra nuestros pechos y brazos abiertos, al encuentro del “hermano de especie”.
Señaló que al abrazar se expresa lo que se siente y se fortalece la afectividad y el autoestima, estableciendo un vínculo sano y lleno de reciprocidad”.
Resaltó que cuando un abrazo dura más de tres minutos y se da con toda el alma, «es existencial», porque nos abrimos corporalmente para mostrar que toda la existencia tiene sentido y se vivencia la motivación para vivir.
La especialista se refirió al abrazo desde el punto de vista psicológico, que estudia el alma y la espiritualidad. Prosiguió explicando que el abrazar es una modalidad del encuentro, en el que las personas se van aproximando sucesivamente multisensorialmente.
También dijo que en este gesto se intercambian afectos, construyendo un espacio para la comunicación, para compartir energía y significados, es como «un circuito de ida y vuelta, todo un diálogo corporal, afectivo y existencial».
Bienestar para el cuerpo
Adicionalmente, señaló que como somos seres Bio-psico-sociales, al abrazar se segrega oxitocina (hormona relacionada al placer), se libera serotonina y dopamina (encargadas del buen humor), lo que genera una agradable sensación de armonía y plenitud; una dosis cargada de bienestar para el cuerpo y el alma.
Origen
El Día del Abrazo lo impulsó el pastor y psicólogo Kevin Zaborney, quien se dedicaba a trabajar con jóvenes delincuentes de Boysville en Mount Morris, Estados Unidos.
Con su trabajo con este sector de la población, el psicólogo de la Universidad de Michigan notó que a la sociedad estadounidense no le gustaban mucho los abrazos ni quería demostrar sus sentimientos en público, incluso entre familiares o personas cercanas.
Zaborney concluyó que este gesto debería durar por lo menos 20 segundos como mínimo y que debería realizarse varias veces al día.
Decidió que el Día del Abrazo podía estar entre Navidad y San Valentín. Es por eso que se celebra un 21 de enero, que con el tiempo se ha ido popularizando y hoy día es una fecha internacional.
En cuanto a la recomendación de la psicología positiva y la biodanza sobre el abrazo, ¿cuántos necesitamos cada día? En realidad, podríamos vivir sin ellos, pero sería como morir lentamente, un poco cada día.
Acerca de esto, la terapeuta familiar Virginia Satir, dijo: “Necesitamos cuatro abrazos al día para sobrevivir, ocho abrazos para mantenernos como estamos y doce abrazos para crecer.» (CNP 13.114)
