Araure.- El Día Mundial de la Fotografía (World Photo Day) se celebra desde el 2007, cada 19 de agosto y conmemora el día en que se presentó públicamente, en 1839, un invento que cambió la historia del mundo: el daguerrotipo.
Su inventor, Louis Daguerre, presentó este aparato a la Academia de Ciencias de Francia, demostrando que se podía capturar una imagen instantánea mediante el uso de un proceso químico, dando lugar a la aparición de la fotografía.
Todos sabemos cuán importante es para la vida actual, hoy todo nuestro mundo gira sobre la imagen, sobretodo para captar y mostrar momentos históricos y capturar detalles que el ojo humano no alcanza a ver.
Ésta es también una gran oportunidad para resaltar los nuevos y un poco más experimentados talentos que se dedican al arte visual, como Juan Mogollón Solórzano, quien como todos, comenzó como aficionado y le ha dado una dirección distinta a la comercial, aunque no la descarta.
Graduado de diseñador gráfico, en el transcurso de su carrera, se enamoró de la fotografía, de la luz, de los momentos únicos y del expectante tiempo en que el revelado se mostraba poco a poco para dar lugar a la imagen.
Mogollón, ha hecho de la fotografía parte de su vida y más que un fotógrafo, se identifica como un artista visual, siempre ligado al quehacer cultural del estado Portuguesa.
«Es mi medio de expresión como cualquier artista, para otros es la pintura, o el dibujo, para mí es la fotografía. Y más allá de la técnica, es mi pasión y modo de vida».
Como amante del arte en todas sus manifestaciones, se le puede ver siempre presente en obras de teatro, muestras de artistas plásticos, recitales o simplemente fotografiando la naturaleza. Cada detalle cuenta, si con la imagen transmite un mensaje positivo, hermoso, más que práctico o lógico.
«Lo que más me gusta, además de la fotografía de autor, es el documentalismo fotográfico o contar historias con imágenes, es mi pasión también. La fotografía callejera o street photo, se suma también a mi portafolio interpretado en mi serie ‘Paisaje Urbano’», comentó.
Diseño y fotografía
«Ambos forman parte de la comunicación visual. Mi transitar por la fotografía ha sido más por el camino de las artes visuales, que de la fotografía comercial. Y eso inició en el año 2005. Lo que he avanzado lo evidencia mi curriculum de exposiciones. Varias colectivas y tres individuales. En mi formación como diseñador gráfico en el Colegio Universitario Monseñor de Talavera (primera promoción) vi fotografía básica y avanzada (hecha con película, no digital) con los profesores Karina Machín y Francisco Albornoz respectivamente», indicó.
Entre los años 2007 y 2010 cambió su residencia a Palmira, capital del municipio Guásimos del estado Táchira, donde complementó sus conocimientos en tres cursos que realizó en la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET) en San Cristóbal.
Ya había iniciado su trayectoria como artista visual, más por instinto que con técnica, con la asesoría del fotógrafo José Ángel Mora Robles.
«Y más allá de los conocimientos, ese profesor sembró en mí una semilla que cultivé al regresar a mi tierra natal, Araure, la de enseñar, también, fotografía. Es un compromiso que me ha servido para seguir evolucionando, porque ser un formador o docente implica convertirse en un eterno estudiante», afirmó.
Ver lo que otros no
«Aprender a ver es lo más importante. ¿Cómo? lo respondo como se lo digo a los participantes de mis talleres: educando al ojo, viendo muchas imágenes, por supuesto fotografías de
los referentes, también pintura y mucho cine. Siendo la visión uno de nuestros cinco sentidos, está conectada con la esencia de cada ser, en este sentido, el intelecto, educación y sensibilidad incide directamente sobre la percepción visual» explicó.
El secreto -dijo- es «visualizar» las fotografías antes de tomarlas y es lo que hace la diferencia. Las fotografías se hacen en la mente y lo que se transmite debe salir entre las entrañas y el corazón, como lo haría un poeta. Lo que se hace en la cámara fotográfica o en el teléfono es simplemente capturar la luz, lo demás lo hace el autor.
Ésta sí, ésta no
Cómo profesional, indicó que hay varios aspectos o características de la imagen que sirven para valorizarla y decidir capturarlas.
En su caso, las principales influencias estéticas provienen de lo plástico de la pintura y lo gráfico del diseño, sumado a los elementos de expresión visual inmersos en su perspectiva particular.
Pero a todo fotógrafo -enfatizó- lo que lo invita a encender la cámara es la luz, su intensidad, temperatura de color, angulación, ese sin duda, el elemento más importante. La luz es nuestra principal materia prima.
Valor artístico
Para Mogollón, el valor artístico de una fotografía ante otra y lo que la hace diferente es el orden de los pasos o metodología.
La técnica incide sobre la estética de la imagen, y eso aplica a todas las artes visuales. Cualquiera puede tener creatividad e imaginación, pero sin formación técnica no se puede materializar lo que se quiere o necesita.
«De la fotografía con película me gusta la conexión entre lo pensado y realizado. Desde la captura, hasta ver la imagen sobre el papel, esa magia es única. La fotografía electrónica o digital tiene muchas bondades (despreciadas por los puristas radicales) Entre lo que me gusta está el hecho de poder intervenirlas digitalmente y aproximarlas a la estética de una pintura, tal cual como lo hago en mi serie ‘Tubos de Ensayo'», acotó.
De sus exposiciones
De su experiencia como expositor comentó que más que muestras importantes, han sido gratificantes. Todas son el resultado de esfuerzos, de inversión de costos y tiempo.
-Sobre todo si es una exposición realizada para ser evaluada por un jurado. Quedar seleccionado en un Salón o Bienal de Fotografía y Artes Visuales, en ese particular, sí aplica el adjetivo calificativo de “importante”, agregó.
¿Qué fotografiar?
«Los que me conocen y saben de mi obra, entienden que no soy fotógrafo, soy solo un artista visual que hace fotografías y que enseña a otros fotografía digital. Por ende lo que más me gusta dista mucho de la fotografía complaciente, como si lo hacen amigos y hermanos del arte fotográfico. Cuando hago fotografía comercial, es para apoyar a los amigos, o en equipo con otros fotógrafos».
Cómo artista visual, más que fotógrafo, Juan Mogollón, documenta con imágenes fotográficas siempre ligado a la cultura: la Orquesta Sinfónica de Araure, exposiciones o eventos en el Museo de Arte Acarigua-Araure, o las expresiones populares como el Via Crucis de Araure, Locainas de Agua Blanca, Zaragozas de Sanareo y la naturaleza.
Cada autor o artista va construyendo su propio código visual. En mis serie ‘Líneas y Texturas’ y ‘Tubos de Ensayo’ hay una influencia de la pintura abstracta y del arte geométrico, esos elementos son los que distinguen o identifican mis imágenes.
Fotografía digital
Agregó que en el transitar del tiempo el público ha cambiado sus preferencias, en comunión con el uso de nuevas herramientas.
«El contenido de mis talleres está dirigido a los usuarios de cámaras fotográficas, sin embargo, muchos lo hacen con sus teléfonos. Tienen funciones cercanas al manejo de una cámara fotográfica, además de muchas Apps que las emulan, pero yo no cambio una Nikon por un IPhone, por ejemplo, y no soy “purista” ni “conservador” es solo mi opinión.
¿Cómo aprovechar las redes sociales?
-Es el medio de comunicación y enlace con el público o target. Publicando allí lo mejor que se tenga en el portafolio, en consecuencia el crítico más importante que todo artista debe tener, es uno mismo, (…) Culmino con una frase de uno de mis referentes favoritos, el maestro francés Henri Cartier-Bresson: “Fotografiar es poner la cabeza, el ojo y el corazón en un mismo eje.” (CNP: 16.100)