Caracas.- La Encuesta Cualitativa Empresarial de Fedecámaras correspondiente al segundo trimestre de 2024 reflejó que las expectativas de crecimiento del sector privado son de 4,2 % al cierre del año, un descenso con los datos aportados por los líderes gremiales durante los meses de enero, febrero y marzo, los cuales apuntaban a una evolución promedio de más del 8 %.
De acuerdo con el reporte del ente gremial compartido con los medios de comunicación, hasta junio de este año, el financiamiento bancario, la situación política, la inseguridad jurídica y las fallas en los servicios públicos continuaron limitando la dinámica de las empresas.
En este período se registró un ligero crecimiento reportado en las áreas manufactura (13,2 %), comunicaciones y otros servicios (6 %), comercio (2,4 %) y agricultura (1,8 %), con relación al primer trimestre del año. Sin embargo, los índices no favorecieron a los sectores turismo, construcción y servicios inmobiliarios, entre otros.
De acuerdo con los datos reflejados en el documento, el empleo se mantuvo estable; mientras que la remuneración promedio mensual del personal obrero en la empresa privada subió 17 % en relación con el primer trimestre y se ubicó en 183 dólares. Esta cifra se traduce en un incremento de 195,2 % respecto al primer trimestre de 2021.
Operatividad limitada
Durante el segundo trimestre del año, la dinámica de las empresas continuó marcada por factores que merman sus niveles de producción y productividad; el financiamiento bancario, con 14,9 %, fue el principal adversario. La situación política (13,4 %) le sigue como segundo factor, luego el entorno macroeconómico (13,1 %), la alta presión fiscal (12,9 %) y las fallas en los servicios públicos (11,3 %). Otros aspectos mencionados: inseguridad jurídica, baja demanda, escasez de combustible, política arancelaria y contrabando.
En lo que corresponde a la falta de créditos, 14,9 % de los consultados indicó que este fue un elemento determinante para el descenso en los indicadores de desempeño empresarial. Los representantes de la manufactura y la agricultura lo ubican en la primera posición; mientras que el comercio y los servicios turísticos lo colocan en el segundo lugar.
Para 88 % de los consultados, la falta de combustible impactó negativamente en la dinámica operativa de las empresas. Los sectores que reportaron mayor incidencia en este indicador fueron manufactura, agricultura, comercio y turismo.
En lo que corresponde al suministro de energía eléctrica, 77 % de los encuestados señaló que tuvo inconvenientes por las constantes fallas en este servicio. De igual manera, u 91 % de la muestra calificó que esta situación tuvo algún tipo de conmoción en el desempeño de las empresas.
Gremios vinculados a los sectores agricultura, comercio, turismo, manufactura, comunicaciones y otros servicios e inmobiliarios, fueron los más afectados por las deficiencias en este servicio público.
Con información de El Pitazo