Salud

Recomiendan a los médicos prescribir actividad física a los mayores de 65 años

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Escrito por Redacción

Durante años, se creyó que la actividad física era peligrosa o innecesaria para adultos mayores, especialmente para quienes enfrentaban enfermedades crónicas o fragilidad.

Sin embargo, una revisión de estudios publicada en la revista Canadian Medical Association Journal demostró lo contrario. La actividad física semanal ofrece al menos 15 beneficios para la salud de las personas mayores de 65 años, incluyendo la posibilidad de prolongar sus vidas.

“La edad, la fragilidad o las limitaciones físicas no deben ser vistas como razones para evitar la actividad física, sino como motivos clave para prescribirla”, afirmó la doctora Jane Thornton, investigadora principal del trabajo y directora de Salud, Medicina y Ciencia del Comité Olímpico Internacional.

Thornton es presidenta de la Cátedra de Investigación de Canadá en Prevención de Lesiones y Actividad Física para la Salud y colaboró con Samir Sinha, del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de Canadá, para hacer el trabajo.

Destacaron que, con adaptaciones adecuadas, el ejercicio puede mejorar la calidad de vida de los adultos mayores, además de prevenir enfermedades de forma significativa. Con la publicación, buscaron dar herramientas prácticas para que los profesionales de la salud prescriban actividad física de manera segura y efectiva.

«Demasiados médicos aún no aconsejan a sus pacientes sobre actividad física, y esperamos que este trabajo pueda servir como un llamado para actuar”, explicó Thornton.

Consultado por Infobae, Jorge Franchella, médico deportólogo y cardiólogo y director del programa de actividad física y deportes del Hospital de Clínicas José de San Martín de la Universidad de Buenos Aires, opinó sobre la revisión: “Es un trabajo excelente. Recalca que para conseguir una longevidad saludable, es clave que los adultos mayores realicen actividad física semanalmente y que los profesionales de la salud deben prescribirla”.

Cuanto más altos niveles de actividad física se alcanzan, se consiguen más beneficios. “Se debe prescribir según la situación de salud de cada adulto mayor”, subrayó.

Cómo debe ser la actividad física en un adulto mayor

La revisión de los investigadores de Canadá destacó que el ejercicio regular reduce el riesgo de más de 30 enfermedades crónicas, incluyendo diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, osteoporosis, depresión y demencia.

Además, 150 minutos semanales de actividad moderada pueden reducir la mortalidad por todas las causas en un 31%, según los autores. “Incluso volúmenes más bajos de ejercicio, entre 83 y 166 minutos semanales, disminuyen los riesgos de mortalidad en un 22%”, mencionaron.

El ejercicio no solo ayuda en la prevención de enfermedades, sino que también favorece la independencia funcional. Actividades como pilates, tai chi y caminatas nórdicas (consisten en caminar con la ayuda de bastones similares a los utilizados en el esquí) fortalecen los músculos y mejoran el equilibrio. De esta manera, se reduce el riesgo de caídas, una de las principales causas de hospitalización en los mayores.

“La actividad física también contribuye a mejorar la movilidad, incluso en adultos mayores con enfermedades crónicas o limitaciones funcionales”, señaló el análisis.

Aquí  los beneficios de la actividad física para adultos mayores:

1.- Reduce el riesgo de desarrollar más de 30 enfermedades crónicas, como enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, osteoporosis, cáncer, depresión y demencia.

2.- Disminuye la mortalidad por todas las causas en un 31% con 150 minutos de actividad moderada semanal.

3.- Mejora la independencia funcional al fortalecer músculos y la movilidad.

4.- Previene caídas, con una reducción del 21% en el riesgo de sufrirlas.

5.- Reduce síntomas de depresión y ansiedad.

6.- Favorece la calidad de vida mediante la reducción de la soledad y el aumento de la socialización.

7.- Preserva la capacidad cognitiva, y así ayuda a prevenir su deterioro.

8.- Mejora la densidad ósea y la salud de las articulaciones y reduce el riesgo de fracturas.

9.- Aumenta la fuerza muscular y la movilidad y reduce la fragilidad.

10.- Disminuye el riesgo de tener que consumir muchos fármacos (“polifarmacia”).

11.- Incrementa la capacidad cardiorrespiratoria y del consumo de oxígeno durante el ejercicio.

12.- Mejora la estabilidad postural.
Mejora la capacidad para hacer actividades diarias.

13.- Se reducen los costos asociados al sistema de salud al prevenir enfermedades crónicas.

14.- Puede aumentar la estabilidad postural en pacientes con enfermedad de Alzheimer.

Estrategias prácticas para implementar el ejercicio

El equipo de investigadores propuso un enfoque gradual para incentivar un estilo de vida activo entre los adultos mayores.

“Los adultos mayores deberían comenzar con actividades de bajo impacto, como caminar o nadar, y progresar hacia 150–300 minutos de actividad moderada semanal”, indicó Thornton. Las recomendaciones también incluyeron ejercicios de resistencia y equilibrio dos veces por semana, adaptados a las características de cada persona.

Los investigadores propusieron el uso de cuestionarios para evaluar riesgos y preferencias, lo cual facilita la personalización de los programas de ejercicio.

Además, sugirieron que los médicos colaboren con fisioterapeutas o especialistas en ejercicio cuando sea necesario. “Los programas grupales no solo mejoran la adherencia, sino que también reducen el aislamiento, lo que contribuye a la salud mental”, destacó Thornton.

Para quienes residen en instituciones de cuidado a largo plazo, los autores recomendaron integrar espacios para movilidad y actividades al aire libre. Esas medidas mejoran tanto el bienestar físico como la calidad de vida de los residentes.

El doctor Roberto Peidró, médico cardiólogo, director del Instituto de Ciencias del Deporte de la Universidad Favaloro y presidente de la Asociación Argentina de Cardiología del Ejercicio y el Deporte, comentó a Infobae tras leer la revisión: “Celebro la publicación de esta revisión. Cualquier edad es buena para hacer actividad física regular. Tiene muchos beneficios para la salud, aunque una de las dificultades es conseguir la adherencia a la práctica constante. Por eso, es importante consultar a un profesional de la salud y realizar actividad de manera grupal. Si las personas mayores practican actividades físicas que le gustan o que las hagan sentir cómodas, puede ser crucial para mantener la constancia a mediano y largo plazo”.

Infobae

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