Acarigua.- Aunque las lluvias se han mantenido de forma continua en el estado Portuguesa, desde la madrugada de este martes, 20 de mayo, los organismos informaron que será entre el jueves 21 y el sábado 24, que se espera la llegada de la primera onda tropical de 2025 a Venezuela.
El director de Protección Civil de la entidad, Daniel Márquez, informó que todos los organismos del Sistema de Gestión de Riesgos y de Seguridad Ciudadana de la región, se mantienen monitoreando las condiciones climáticas en la región.
El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh), estima un incremento progresivo de la cobertura nubosa, con precipitaciones de intensidad variable, algunas con actividad eléctrica, siendo más intensas y frecuentes en la Guayana Esequiba, Bolívar, Amazonas, Delta Amacuro, Monagas, Sucre, Miranda, Distrito Capital, La Guaira, Aragua, Carabobo, Yaracuy, Lara, llanos centrales, occidentales, los Andes, Falcón y Zulia.
Por su parte, Márquez destacó la importancia de estar preparados para posibles lluvias intensas y tormentas eléctricas que podrían generarse por la entrada de la onda tropical N.° 1.
“Tenemos un sistema de vaguada muy activa, con una interacción moderada en la zona de convergencia intertropical y con alguna interacción de vientos que han generado una lluvia de intensidad variable en toda la entidad (…). Nos mantenemos en monitoreo en los cauces, quebradas y ríos para estar previniendo cualquier situación”, explicó en un video compartido por las redes de la institución.
Las autoridades recomiendan a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales y hacen hincapié en la necesidad de evitar la movilización a zonas de riesgo como cauces, ríos, canales y quebradas.
Asimismo, se insta a las mismas comunidades a tomar medidas de prevención, especialmente en áreas vulnerables a inundaciones y deslizamientos de tierra.
A pesar de las horas de lluvias que se han presentado este 20 de mayo, ante las autoridades no se han reportado afectaciones como inundaciones en viviendas o familias damnificadas.
Por Mariangel Moro Colmenárez (CNP 25.482)