Acarigua.- Comerciantes que se encuentran ubicados en la avenida 30, entre calle 27 y 28 del centro de Acarigua, piden a Corpoelec la reparación de la caja de medidor, que se ha convertido en un riesgo para los transeúntes.
Judith Zambrano indicó que tienen años pidiendo a los funcionarios de Corpoelec que reparen este cajón que “está atravesado, se está cayendo y también produce chispas eléctricas y candela”. Afirmó que puede afectar a cualquier persona que pase por esta acera.
Señaló que una señora sufrió una herida al golpearse la cabeza con la caja de medidor, por lo que se amerita la intervención urgente de la estatal eléctrica nacional, ya que “en cualquier momento se puede caer y las consecuencias pueden ser mayores”.
Zambrano dijo que han pedido ayuda personalmente al personal de la oficina ubicada en el centro de Acarigua, pero todo se ha quedado en promesas. (CNP 13.114)