Araure.- Aunque actualmente los volúmenes de siembra de soya son pequeños, el sector involucrado estima que este año dé unos pasos hacia adelante, con un crecimiento mínimo de 100 % en la superficie de cultivo que, para el 2024, superó las 1000 hectáreas, entre Portuguesa, Cojedes, Guárico y Yaracuy.
Para Hernán Torre, miembro del Polo Agropecuario, los productores siguen viendo a la soya como una alternativa de siembra, debido a sus reducidos costos de inversión, mayor estabilidad productiva, mejor estabilidad comercial en la cadena de pagos a causa de la baja intermediación y a la demanda interna sostenida.
“También es importante recordar que los precios alternos de importación son una ventana que debemos aprovechar. Es posible que se comiencen a ver más fincas sembradas con soya en el ciclo de lluvias. ya que es un cultivo que tiene una alta demanda por la industria nacional y ni siquiera se produce el 5 % de lo que necesitamos consumir”, expresó.
Comentó que se desconoce la intención de siembra, debido a la situación de pagos demorados de la cadena de maíz y frijol. Sin embargo, aseguró que la soya es el nuevo jugador importante dentro del sector agropecuario “y una oportunidad que tienen los productores para diversificar y reducir los riesgos asociados principalmente al comportamiento de la cadena del mercado interno en cereales”.
El consultor agropecuario manifestó que actualmente hay un equipo del Polo Agropecuario capacitándose en Brasil. “Es posible que tengamos nuevos procesos productivos innovadores para aplicar en esta época de lluvias, con el objetivo de bajar costos de producción, aumentar rendimientos e intensificar la producción tanto en soya como en arroz”, aseveró. (CNP 18.050)