Araure.- La cosecha de arroz del ciclo invierno 2025 ha iniciado con resultados prometedores en el campo venezolano. A pesar de la incertidumbre generada por las fuertes lluvias y la poca radiación solar durante la siembra, el presidente de la Federación Nacional de Arroz (Fevearroz), José Luis Pérez, aseguró que los primeros rendimientos han sido “bien aceptables”, superando los 5 mil kilos por hectárea.
Pérez destacó que, aunque solo se ha cosechado menos del 10 % del área total, las expectativas son altas. Recalcó que en el estado Portuguesa se sembraron 37.000 hectáreas, mientras que los estados vecinos de Barinas, Cojedes y Guárico aportaron otras 37.000 ha, sumando un total de 74.000 hectáreas para este ciclo. Esto representa un avance significativo que, según Fevearroz, aumentará el abastecimiento nacional en comparación con el año pasado.
“Se está avanzando y arrancamos con buen pie. Tenemos un total de 74 mil hectáreas, lo cual es bastante prometedor en lo que respecta al abastecimiento. Esa es la esperanza que tenemos. Agradecemos que Dios y el clima nos acompañen porque todavía tenemos mucha tela que cortar”, dijo.
Precios en alza
El sector también ha recibido buenas noticias en materia de precios. La cosecha arrancó con un valor de 0,48 dólares por kilogramo de arroz paddy húmedo, superando los $0,46 del ciclo anterior. El dirigente gremial informó que el sector industrial ya aplicó un nuevo aumento, elevando el precio a $0,50 por kilogramo.
Pérez comentó que este ajuste responde a varios factores, entre ellos, el déficit de arroz que aún existe en el mercado nacional y el elevado costo de las importaciones. “El arroz nacional, además de ser de excelente calidad, fomenta el empleo y toda la cadena productiva”, afirmó, haciendo un llamado a pagar un precio justo para motivar a los productores a seguir invirtiendo.
A pesar del optimismo, los productores tienen retos por delante, como la cosecha extendida que durará hasta finales de diciembre. Fevearroz solicitó al sector ejecutivo que controle las licencias de importación para evitar una sobreoferta que pueda perjudicar los precios.
“Creo que vamos bien, si todos los actores de la cadena, incluyendo el Ejecutivo, encargado de controlar las licencias, nos acompaña en ese sentido de no permitir una sobreoferta en el mercado que —en un momento dado— pueda perjudicar el precio o la logística del manejo de la cosecha. Si todos ponemos de nuestra parte podemos tener resultados ejemplares en el circuito”, afirmó.
En cuanto a la comercialización, el pago se realiza a 30 días a la tasa del Banco Central de Venezuela (BCV). Sin embargo, Pérez enfatizó que la federación busca que la industria reconozca un porcentaje del pago en divisas, lo que permitiría a los agricultores cubrir los gastos programados en el ciclo productivo. (CNP 18.050)
