Acarigua.- La falta de gasolina, recrudecida en la última semana en el estado Portuguesa y en gran parte del territorio nacional, está llevando al borde del colapso a los productores agrícolas, quienes en plena siembra de maíz, correspondiente a este ciclo invierno, no han podido desplazarse, como se debe, a sus unidades de producción.
Las asociaciones agrícolas de la región, ya han advertido que la siembra del maíz, el rubro de mayor consumo nacional, está retrasada por las fuertes lluvias que desde inicio de mayo han azotado a la región. Ahora, no se han podido aprovechar algunos días de «verano» o sol, porque la falta de gasolina les impide a los productores llegar con el gasoil asignado a sus fincas.
Así lo contó a Portuguesa Reporta, Eduardo Sánchez, productor y director general de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro), explicando que el 90 % de las unidades que usan los agricultores para desplazarse funcionan a base de gasolina.
«Estamos en plena temporada de siembra de maíz, la más importante del año y que es social porque siembran desde los conuqueros hasta los productores con mayores extensiones de tierras. Todos estamos afectados, no solamente por la cantidad de agua que ha llovido, sino también por la escasez de gasolina que hace prácticamente imposible que los productores se dirijan a sus centros de producción o a buscar gasoil a las plantas de distribución», explicó.
Sánchez precisó que aunque la escasez de combustible siempre se ha sentido en el estado, ahora es más riesgosa, porque se ha acentuando y, además, porque es la época crucial y fundamental para la siembra.
«Ahora mismo tenemos que aprovechar los escasos días de verano (de sol) que están haciendo, pero nos toca pasar dos y tres días en una cola para surtir gasolina y una cantidad que nos puede hacer desplazar solamente unos 80 o 90 kilómetros«, expresó el vocero.
Como ya es conocido, la mayoría de las unidades de producción en el estado Portuguesa y el resto las regiones agroproductivas, se encuentran en zonas rurales, a una distancia considerable de la ciudad, donde están residenciados los agricultores o a donde deben acudir para abastecerse con lo necesario para las labores en el campo.
Sánchez indicó que con la crítica situación que se está viviendo por la falta de gasolina, es muy probable que no se llegue a la cantidad de hectáreas de maíz que se tienen estimadas para este 2023, cuya intención era sembrar 300.000 has de maíz blanco y amarillo, en todo el país, según cifras de Fedeagro.
«La escasez no solamente la estamos viendo en Portuguesa, sino para el resto de las regiones agrícolas como lo son Guárico, Cojedes, Yaracuy, Lara y Barinas».
Destacó que, en Portuguesa, el Gobierno regional hace un gran esfuerzo para tener el gasoil y despachar a los pequeños y medianos productores, pero éste se utiliza para que la maquinaria haga las labores en el campo. «Aunque tengamos gasoil y se haga la mejor voluntad para conseguirlo, si los productores no se pueden desplazar a sus unidades de producción para llevarlo y hacer la supervisión de las labores, estamos en riesgo de perder todo el trabajo«.
El vocero del gremio agrícola también indicó que, aparte de la siembra, el proceso para mantener el cultivo óptimo y que llegue a buen término, es de dos meses aproximadamente, en el cual se requiere de labores como la fumigación y el reabono, con materiales que los productores deben hacer llegar a sus fincas.
«Hay que advertir que la falta de gasolina representa un gran problema agrícola y social porque es el cultivo que más ingreso da a los estados agrícolas, por ello es necesario que se implemente un plan de contingencia para abastecer las zonas más neurálgicas, como la producción de alimentos y el estado Portuguesa es fundamental en ello. Hay que paliar esta emergencia que tenemos», sostuvo Sánchez, al hacer un llamado al Gobierno regional y nacional. (CNP 25.482).