(Tampa).- El repique de un golpe tocuyano alerta a la directora. Ella levanta sus manos. El coro está atento. Con un movimiento ondulante, apasionado y vivaz, Astrid Sánchez indica el inicio de «Amalia Rosa», uno de los temas emblemáticos del canto polifónico venezolano. El teatro vibra, el público se levanta y ovaciona de pie la excelente actuación
Astrid es una barquisimetana, formada en el Sistema de Orquestas y Coros Sinfónicos de Venezuela, reconocido no solo por su excelencia pedagógica y de interpretación instrumental, sino por el efecto de transformación social de niños y jóvenes, que ha sido replicado en 40 países de Europa, América, Asia, África y Oceanía.
Astrid Se inició a los cinco años de edad en el Conservatorio de Música Vicente Emilio Sojo, de Barquisimeto, cursando estudios de teoría y solfeo, armonía, oboe, flauta transversa y a la edad de siete años descubre lo que es su mayor pasión, el canto coral, cuando ingresa a los Niños Cantores de la Orquesta Sinfónica de Lara.
Posteriormente, también participa en el Coro Sinfónico de Lara y el Coro Sinfónico Nacional Infantil de Venezuela, y más adelante, a la Camerata Larense, una de las agrupaciones corales más importantes de Venezuela.
Su experiencia también abarca la música popular porque su estado natal, Lara, es conocida como la capital musical de Venezuela, por el talento y esplendor de su manifestación artística. Una vivencia que respalda su excelente currículum como maestra y directora.
Ha dedicado más de 25 años a la música, no solo con sus estudios en el conservatorio y el Sistema Nacional de Orquestas, sino también perteneciendo a agrupaciones folklóricas y participando en festivales nacionales e internacionales de música llanera. Fue ganadora de la Voz Escolar y Reina del Folklore del municipio Iribarren, miembro de estudiantinas, siempre involucrada con actividades artísticas y culturales.
Actualmente, es directora de la Coral Wattaka Tampa, Alto Leader del Parish Choir de la Iglesia St. Mark the Evangelist Catholic Church, del Children’s Choir de la Iglesia St. Mark the Evangelist Catholic Church y de la Coral Las Américas, además de profesora de piano en el “Sunstate Orchestral Program” de El Sistema Tampa, Florida.
Dirige la coral Wattaka Tampa desde el 2023
«Entre todas las ramas que tiene la música decidí especializarme en la dirección coral, porque amo el canto. Es una de las expresiones artísticas más completas. El canto incorpora la poesía en la línea melódica y es hermoso trabajar en equipo con grupos de personas que, su vez, se entregan y les agrada cantar, aprender y compartir», expresó.
Exitosa en Estados Unidos
Nada es imposible para quien sueña y trabaja con disciplina haciéndolos realidad. Las oportunidades surgen y las personas indicadas aparecen para irse a Estados Unidos, en el 2022, e integrarse a un programa de música en la ciudad de Tampa, Florida, inspirado en el Sistema de Orquestas de Venezuela. Por supuesto, con la intención de formar el coro infantil sinfónico, institución con la obtuvo excelentes resultados profesionales.
Conociendo su trayectoria, empatía, firmeza y pasión, fue invitada por Ramón Ayala, presidente de Wattaka, una fundación sin fines de lucro que se ha propuesto la difusión y desarrollo del acervo cultural venezolano, mediante la música y otras manifestaciones culturales, desarrollando una proyección importante. Paralelamente, colabora y participa con otras agrupaciones corales, en las fiestas religiosas más importantes de Latinoamérica, celebradas en las iglesias de Tampa
Bajo la dirección de Sánchez desde el año 2023, la coral Wattaka ha llevado a cabo varios conciertos importantes en teatros como el New Tampa Performing Art Center, Firs Orlando Hispano, HCC Performig Art de Ybor City, The Venecian Center, en el Fall Festival y el International Mother Lenguaje Day, entre otros relevantes espacios de integración artística, y está haciendo un trabajo extraordinario, no solo mostrando la cultura venezolana en Estados Unidos, sino involucrando y enseñando nuestra música a niños americanos y de otros países hispanohablantes.
![Wattaka Kids es el semillero donde Astrid cultiva la cultura venezolana, enseñando a la generación de relevo](https://portuguesareporta.com/wp-content/uploads/2025/02/IMG-20250211-WA0023-300x200.jpg)
Wattaka Kids es la generación de relevo que seguirá diseminando la cultura venezolana
«Emigrar siempre trae consigo dificultades y nostalgia por lo que queda, pero detrás de los obstáculos vienen las satisfacciones que es ahora ese legado musical que traspasa fronteras. Hacerlo a través de la enseñanza y dejar una huella en cada ciudad o en cada país donde he estado me llena de satisfacción y ser, no solo formadora de grandes músicos, sino de grandes personas, me llena de mucha emoción y felicidad en un mundo que los niños están inundados de tecnología y cada vez el contacto físico es menor», indicó.
Wattaka celebra y promueve la cultura venezolana y latinoamericana, a través de la música y el canto coral en los Estados Unidos. Cuando Astrid asumió la dirección apenas eran dieciocho integrantes y ahora son 31 adultos que disfrutan y cantan su amor por Venezuela. Un aspecto destacable es que también fundaron la coral de niños Wattaka Kids, integrada por 15 niños de diferentes países.
Añadió que es importantísimo el trabajo que hacen a nivel cultural, porque no solo fomentan la integración cultural sino que, además, conectan con la comunidad para que puedan, a través de una canción, sentirse más cerca de sus países. Estados Unidos es un país multicultural —dijo— y ya las personas empiezan a reconocer nuestros ritmos venezolanos.
-También es un momento donde nos sentimos en casa, porque en nuestros ensayos sentimos que somos una familia, con personas mayores, jóvenes, niños. Nos unimos cada martes y viernes con mucho cariño para hacer música coral, dar lo mejor de nosotros y luego verlo reflejado en conciertos donde el público nos aplaude, ríe y llora de emoción.
Para lograr esta influencia casi mágica, Astrid, enseña a leer las partituras, técnica vocal, prepara arreglos originales, e investiga y recrea las composiciones que hicieron famosos a grupos como el Quinteto Contrapunto, y orfeones universitarios que dieron brillo a nuestra música.
«Este grupo de personas no son músicos profesionales, pero de verdad que elevan progresivamente su nivel, trabajando con mucho profesionalismo y esto se refleja en que cada vez nos reconocen más, y nos invitan a participar en espectáculos y festivales», agregó.
–Estuvimos hace poco con el gran músico venezolano César Muñoz, quien trajo su Cata Musical a Tampa. Fuimos invitados a su show y con gran satisfacción recibimos su reconocimiento, alentándonos a seguir a promoviendo la música nacional, porque es lo que hace que nos sintamos más cerca de nuestro país», comentó con orgullo.
Su paso por Colombia
Antes de llegar a Estados Unidos y dispuesta a conseguir un alto nivel académico, Astrid terminaba la carrera de ingeniería electrónica en la Universidad Experimental Politécnica y, paralelamente, viajaba a Caracas, formándose en el Programa Nacional de Jóvenes Directores de «El Sistema«. Surge, entonces, la oportunidad de emigrar a Colombia, donde tiene propuestas de trabajo en el área cultural.
«En la ciudad de Villavicencio, Meta, trabajé para la corporación Korokoras de la Orinoquia, organización donde preparaba niños para grandes festivales internacionales. Fue una experiencia muy satisfactoria, porque mis alumnos lograron primeros y segundos lugares en todos los concursos donde participaron», indicó.
En varias academias de música de ese país, fue profesora de canto, piano y lenguaje musical y maestra de música, en un colegio.
La experiencia fue tan enriquecedora y productiva que decide emprender junto su esposo, Luis Manuel Orozco, —músico multiinstrumentista— su propia academia, la Smart Music School, que rápidamente y por el excelente trabajo de Astrid como directora, registró a más de 100 niños.
«En Colombia —además— integré como flautista la agrupación folklórica Pajarillo cruza’o, con la que representamos a Venezuela en diferentes festivales internacionales en la categoría de “Ensamble nuevo formato del joropo”, obteniendo el segundo lugar en tres de ellos», comentó.
En ambos países, Astrid Sánchez ha mostrado su talento en las diversas facetas a las que se ha dedicado: ejecutante de flauta transversa, piano, arreglista, intérprete y, sobre todo maestra, y directora coral.
En diciembre de 2024, recibió en uno de los últimos conciertos del año con Wattaka, una placa de reconocimiento por su destacado aporte a la cultura hispanoamericana y por la difusión de la música venezolana, por parte de Venezuela-USA Fundation.
La cultura venezolana seguirá llegando a los corazones de las naciones del mundo, gracias a personas que, como Astrid, van sembrando la semilla de la música y conquistando espacios, porque no hay fronteras donde el arte, el conocimiento y la belleza toman las riendas de la vida. (CNP 16.100)