La estrategia del despiste volvió a rendir frutos para Marvel Studios. Tras meses de evasivas y desmentidos oficiales, el primer adelanto de Avengers: Doomsday (proyectado exclusivamente en cines) confirmó lo que millones de seguidores anhelaban: el regreso de Chris Evans como Steve Rogers.
El clip fue descrito por el público y críticos como una pieza de altísimo impacto emocional. En él, se muestra a un Rogers veterano retomando su icónico uniforme, pero con un giro narrativo que dejó a la audiencia atónita: la confirmación de su vida junto a Peggy Carter y la existencia de un descendiente.
Este movimiento no solo eclipsa el ya polémico regreso de Robert Downey Jr. como el Doctor Doom. Muchos afirman que redefine el tablero de juego para el Universo Cinematográfico de Marvel.
Mientras la campaña de marketing apenas calienta motores con tres avances adicionales previstos para las próximas semanas, la industria se pregunta si el regreso del Capitán América original restará protagonismo a la actual versión de Sam Wilson (Anthony Mackie en el papel del superhéroe)
Lo que es innegable es que los hermanos Russo lograron recuperar el misticismo de la saga, convirtiendo una simple proyección en un evento de escala global que promete devolver a la franquicia a su época dorada.
El Nacional

