Su técnica es el tejido, ella que teje el hilo, quiso llevar esos nudos a otros materiales y escogió el aluminio. Su obra es crochet, espacial y de gran magnitud, pero con alambre.
Gabriela Herrera, @gattitude, estudió artes, apenas se está descubriendo -dice- en esta actividad a la que ha decidido dedicarse por completo. En España cursó curaduría y vivió una experiencia importante, entre artistas, galeristas y coleccionistas de arte.
Art.raure, es su estudio, el pequeño mundo donde fui a entrevistarla y que comparte con otro artista plástico, entre dibujos, bocetos en la pared y muchos colores.
Todo comenzó trabajando con su familia, tenía que ir a las ferreterías a comprar materiales de construcción, por eso, eligió una técnica que ella denomina «de obra gris». Como la estructura de una casa a la que luego su dueño le dará el toque personal.
«Es arte abstracto, tú ves átomos, otras animales o estrellas. Definitivamente son formas geométricas unidas unas con otras».
Por no estar fijada a ninguna base; en el alambre ondulado a mano, flexible y hueco, cada quien ve algo distinto, pero es con la luz como esas formas toman tres dimensiones.
«Yo he instalado todas mis piezas, porque mi firma sólo se estampa si la hago y queda dónde y tal como la soñé». Trabaja ahora en una obra inmensa, que irá colgada paralelamente a una escalera de cuatro metros de altura.
Gabriela siempre se sintió atraída por el arte, pero fue en New York, de la mano de su experto tío Alí Cordero, y su prima Valeria, recorriendo museos y galerías, en la más exquisita vorágine citadina de las «fine art», donde ocurrió la magia.
Mi tío me aconsejó: «sigue tu obra, ella te llevará a donde vayas a ir». Y eso hace.. se deja llevar por el arte que corre por sus venas. (CNP:16.100).
