El ayuntamiento de París inauguró este sábado la temporada de las denominadas playas del Sena, abiertas para que el público general pueda realizar actividades lúdicas, refrescarse y tomar el sol, en un verano marcado por el espíritu olímpico en la capital francesa.
La que es la edición número 23 de Paris Plages (París Playas) permitirá hasta el próximo 8 de septiembre disfrutar de tumbonas y sombrillas, terrenos de deportes, juegos para niños o piscinas temporales, entre otras propuestas, que habitualmente tienen mucho éxito de asistencia.
Este año, además, las playas del Sena serán una grada de excepción para ser testigo de algunos de los hitos de los Juegos.
“El júbilo olímpico se mezclará con París Playas con el relevo de la antorcha en julio y, sobre todo, las pruebas de ciclismo en carretera a principios de agosto”, destacó la alcaldesa de París, la socialista Anne Hidalgo, en un comunicado.
Las zonas habilitadas como playas se extienden tanto por las orillas del Sena como por el canal del Bassin de la Villette y, como novedad este año, en el de Saint-Martin.
Algunas, como el parque Rives de Seine, al estar situadas en el recorrido previsto de la ceremonia de inauguración olímpica del 26 de julio, no abrirán al público hasta agosto por las medidas excepcionales puestas en marcha para garantizar la seguridad de la apertura.
El año pasado París Playas terminó unos días antes, pero este año la fecha de clausura de la temporada se ha hecho coincidir con el cierre de los Juegos Paralímpicos (28 de agosto-8 de septiembre).
En paralelo a esta iniciativa popular, las aguas del Sena siguen siendo una incógnita para París 2024, ya que está previsto que el emblemático río acoja pruebas como el triatlón o el maratón en aguas abiertas.
De acuerdo con las autoridades locales, los últimos signos son positivos, ya que en siete jornadas entre finales de junio y comienzos de julio los niveles de contaminación del agua no superaron los umbrales fijados por la directiva europea para el baño en casi todas las muestras tomadas.
Las administraciones han invertido 1.400 millones de euros desde 2016 en un ambicioso plan para permitir el baño en el Sena, donde no está autorizado desde hace casi un siglo por razones sanitarias.
El plan es que, como herencia de los Juegos, el Sena pueda estar abierto al baño para el público en tres puntos de la capital a partir de 2025.
Con información de Efe