Joe Biden se rehúsa a abandonar su carrera por un segundo periodo al frente de la Casa Blanca, mientras crecen las reticencias entre los demócratas para que dé un paso al costado.
En una carta de dos páginas dirigida a los congresistas de su partido, difundida este lunes 8 de julio, el mandatario estadounidense señaló que “la cuestión de cómo avanzar ha estado bien planteada desde hace más de una semana. Y es hora de que esto termine”.
Cualquier debilitamiento de la resolución o falta de claridad sobre la tarea que tenemos por delante solo ayuda a Trump
El jefe de Estado hizo hincapié en que la bancada azul tiene “una tarea”, que es derrotar al virtual candidato republicano, el polémico expresidente, Donald Trump, en los comicios del próximo 5 de noviembre.
«Tenemos 42 días para la Convención Demócrata y 119 días para las elecciones generales (…) Cualquier debilitamiento de la resolución o falta de claridad sobre la tarea que tenemos por delante solo ayuda a Trump y nos perjudica a nosotros. Es hora de unirnos, avanzar como un partido unificado y derrotar a Donald Trump”, subrayó el líder de la Oficina Oval.
Profundamente divididos por la candidatura del presidente Joe Biden, los legisladores demócratas regresan a Washington, tras el receso de mitad de año, en un momento crucial. Los progresistas deben decidir si trabajan por revivir su campaña a las presidenciales o suceder al mandatario y candidato, un movimiento también decisivo para el futuro político del partido.
La ansiedad aumenta a medida que legisladores demócratas de alto rango se unen a los llamados para que el presidente se haga a un lado después de su cuestionado desempeño en el debate del pasado 27 de junio y su desafiante respuesta a mantenerse en la contienda.
Aunque Biden defendió sus ideas y demostró estar bien preparado con cifras y otros datos relevantes, sus silencios, confusiones, dificultad para terminar las ideas al hablar y titubeos causaron una avalancha de críticas y cuestionamientos sobre su salud y capacidad para gobernar por cuatro años más a la primera potencia.
Algunos de los partidarios más acérrimos del presidente redoblan su apuesta para que Biden compita por un nuevo periodo en el Ejecutivo, insistiendo en que no hay nadie mejor para vencer a Trump, en las que son consideradas por muchos como unas de las elecciones más cruciales en la historia reciente de EE. UU.
Mientras los legisladores sopesan si el mandatario debería quedarse en la contienda o abandonar la carrera por la Casa Blanca, no parece haber respuestas fáciles a la vista.
Estas nuevas declaraciones de Biden se conocen después de que el pasado 3 de julio la Casa Blanca desmintiera un informe del diario ‘The New York Times’ que señalaba que el mandatario evaluaba si debía abandonar su candidatura. La Administración remarcó que el mandatario irá «hasta el final» en la competencia electoral, pero las dudas y cuestionamientos aumentan dentro y fuera del Partido Demócrata.
Biden encara una carrera contrarreloj para convencer sobre su candidatura
El presidente se encuentra en medio de una coyuntura frágil y muy volátil, tanto para él, como para su partido.
Los demócratas que han trabajado junto a Biden durante años- si no décadas-y han apreciado el trabajo de su vida en prioridades políticas ahora se enfrentan a preguntas incómodas sobre su futuro político. Y esto se está desarrollando mientras el mandatario recibe a los líderes mundiales para la cumbre de la OTAN esta semana en Washington.
El tiempo no está de su lado, a casi un mes de la Convención Nacional Demócrata, en la que se confirma al candidato del partido para las presidenciales, y apenas una semana antes de que los republicanos se reúnan en Milwaukee para ratificar la nominación de Trump.
Muchos demócratas argumentan que la atención debe centrarse en el caso penal ‘Stormy Daniels’ contra el expresidente, por el que fue declarado culpable el pasado 30 de mayo de 34 cargos relacionados con falsificación de registros comerciales.
Además de los cargos federales pendientes que enfrenta, por sus esfuerzos de anular las elecciones de 2020, en las que el republicano perdió la Presidencia frente a Biden.
Es lo que el propio Biden podría llamar un punto de inflexión. Mientras se muestra desafiante para continuar en la contienda electoral, los demócratas en la Cámara de Representantes y el Senado deciden entre cerrar filas en torno a su dirigente o cambiar de rumbo.
«No voy a permitir que un debate de 90 minutos borre tres años y medio de trabajo. Me quedo en la carrera y venceré a Donald Trump», remarcó Biden durante un mitin el pasado 5 de julio.
Aumentan las voces en el Partido Demócrata para que Biden retire su candidatura
En un esfuerzo por “estar en la misma página”, el líder demócrata de la Cámara Baja, Hakeem Jeffries, está convocando a los legisladores a reuniones privadas antes de mostrar su propia preferencia, según señaló una persona familiarizada con este asunto, que habló con la agencia de noticias AP en condición de anonimato. Jeffries planea reunir este lunes a los demócratas, cuyas candidaturas a la reelección son más vulnerables.
Pero una llamada privada el domingo 7 de julio entre unos 15 miembros principales del comité de la Cámara expuso la creciente división cuando al menos cuatro demócratas más: el representante Jerrold Nadler de Nueva York, el representante Jim Himes de Connecticut, el representante Adam Smith del estado de Washington y el representante Mark Takano de California, aseguraron en privado que Biden debería hacerse a un lado.
Nadler, como el miembro de mayor rango que estuvo presente en la comunicación telefónica, fue la primera persona en hablar y afirmar que Biden debería retirar su candidatura, según una fuente familiarizada con la llamada, que también habló en condición de anonimato. Nadler mostró su postura consciente de su antigüedad en el Legislativo y de que permitiría que otros congresistas se unieran a su llamado.
Muchos otros en la llamada expresaron preocupaciones sobre la capacidad del presidente para continuar en la contienda y sus posibilidades de ganar la reelección, incluso aquellos que no llegaron a sostener que Biden debería retirarse de la carrera.
Otros miembros más, entre ellos la representante Maxine Waters de California y el representante Bobby Scott de Virginia, ambos líderes del Caucus Negro del Congreso, hablaron enérgicamente en apoyo al jefe de Estado, al igual que el representante Richard Neal de Massachusetts, el principal demócrata del poderoso Comité de Medos y Arbitrios.
Además, varios legisladores parecían frustrados al considerar que su líder no está brindando dirección o un camino a seguir, según personas familiarizadas con la convocatoria. Un congresista demócrata señaló que, independientemente de la decisión, la situación tiene que “terminar ahora”, subrayó una de las fuentes.
Para Neal, así como Biden venció a Trump en 2020, “lo volverá a hacer en noviembre” de este año.
AP
