Este ha sido el sismo más mortífero en Marruecos en las últimas seis décadas. El conteo de las personas que fallecieron a causa del temblor va en 2.012, según el Ministerio de Interior y 2.059 personas han resultado heridas, de las cuales 1.404 en estado grave. La mayoría de muertes se produjeron en zonas montañosas de difícil acceso.
El temblor, que se produjo el viernes 8 de septiembre, a las 23:11 p.m., tuvo una magnitud de 7,2, de acuerdo al Centro Geofísico de Marruecos, aunque el Servicio Geológico de Estados Unidos lo estimó en una magnitud de 6,8, con una profundidad relativamente baja, de 18,5 kilómetros.
Su epicentro fue la Ighil, en las montañas del Alto Atlas, a unos 72 kilómetros de la ciudad de Marrakesh. También se sintió fuerte en, Rabat, la capital del país, a unos 350 kilómetros al norte del epicentro; y en la ciudad costera de Imsouane, a unos 180 kilómetros al oeste.
Los templos religiosos quedaron bastante afectados
Muchas personas prefieren mantenerse en exteriores, bajo alerta ante posibles réplicas.
En el pueblo de Asni, cercano al epicentro, la mayoría de las casas se derrumbaron. «Nuestros vecinos están bajo los escombros y la gente está trabajando duro para rescatarlos», dijo Montasir Itri, un vecino.
En otro pueblo, más al oeste, cerca de Taroudant, Hamid Afkar dijo que la tierra había temblado por 20 segundos. «Las puertas se abrieron y cerraron solas mientras corría escaleras abajo desde el segundo piso».
El Ministerio del Interior urgió a la calma, comunicando en televisión que el sismo había afectado las provincias de Al Hauz, Azilal, Uarzazat, Marrakesh, Chichaoua y Tarudant.
Las labores de búsqueda de sobrevivientes continúan
Destrozos en la medina de Marrakesh
Los edificios del centro histórico, considerado patrimonio de la humanidad por Unesco, sufrieron daños; por ejemplo cayó el minarete de la mezquita de la plaza Yamaa el Fna, en el corazón de Marrakesh. Y los servicios de rescate avanzan entre algunos de sus escombros.
«Aún no puedo dormir en la casa por la impresión y tampoco el centro histórico está compuesto de casas antiguas. Si una cae, provocará el colapso de las otras», dijo el residente Jaouhari Mohamed a Reuters, mientras describía escenas de desesperación de los habitantes buscando refugio.
Autoridades avanzan en las labores de rescate
Medios locales como TFT Morocco han publicado videos en los que se evidencian los destrozos.
También Al-Arabiya mostró videos compartidos en las redes sociales, en los que se ven nubes de polvo y cómo las paredes de algunos edificios se derrumbaban.
Las personas siguen identificado a sus familiares fallecidos
“Todo es la voluntad de Dios, pero hemos sufrido grandes daños”, dijo Miloud Skrout a Reuters, residente de Marrakesh.
Reacción de la comunidad internacional
Gobiernos alrededor del mundo han expresado su solidaridad y han ofrecido su auxilio. Turquía, en donde un terremoto provocó la muerte de más de 50.000 personas en febrero, declaró estar lista para apoyar al país africano, “con todos (nuestros) medios”, dijo el presidente Recep Tayyip Erdogan en X, antiguo Twitter.
Emmanuel Macron, presidente de Francia, declaró en X, que “estamos todos conmocionados tras el terrible sismo en Marruecos. Francia está lista para ayudar con los primeros auxilios”.
La televisión pública española reportó que el terremoto llegó a sentirse en Huelva, Sevilla, Málaga y Jaén, ciudades en el sur de España.
El presidente del Gobierno en funciones Pedro Sánchez también reaccionó en la red social:
Otro fuerte temblor en Marruecos ocurrió en 1960, de magnitud 5,8, dejó al menos 12.000 víctimas, según estimaciones del Servicio Geológico de Estados Unidos. De acuerdo a la institución, los terremotos de esta magnitud son poco comunes en la región. El último sismo, de magnitud 6, que tuvo lugar a menos de 500 km del epicentro del temblor registrado este viernes, se produjo en el año 1900.
Con Reuters y medios locales
