Mariana González de Tudares, esposa de Rafael Tudares Bracho e hija del presidente electo Edmundo González Urrutia, alzó su voz nuevamente para denunciar que su esposo cumple este viernes 10 meses de “detención arbitraria y desaparición forzada” bajo custodia de las autoridades venezolanas.
En un comunicado emitido este 7 de noviembre, González exigió al régimen de Nicolás Maduro una “fe de vida” de su esposo, cuya suerte y paradero le han sido sistemáticamente negados.
10 meses sin comunicación ni derechos
A través de su cuenta oficial en la red social X, Mariana González lamentó la falta de respuesta y acceso a su esposo.
El texto completo, fechado en Caracas, subraya que las gestiones humanitarias han sido solamente soslayadas por las instituciones y autoridades del Estado venezolano con el único propósito de que González no conozca la suerte y paradero real de su esposo.
“Un rehén en un clandestino proceso penal”
Mariana González de Tudares califica el proceso penal contra su esposo como clandestino y rechaza la acusación de haber cometido hechos asociados al terrorismo.
Denuncia que Rafael Tudares Bracho es un rehén y que el Estado venezolano y sus funcionarios han violado de manera sistemática los derechos humanos y el debido proceso de su esposo, al negarle las garantías procesales y encubrir su desaparición forzada, conducta que la Constitución venezolana prohíbe expresamente en su artículo 45
Aunque se le impuso una defensora pública, la familia ha sido informada de manera extraoficial de que Rafael Tudares estaría presuntamente detenido en el Rodeo I (Sesmas), pero se le han negado más de 30 oportunidades para verificar esta información y su estado de salud.
El Nacional

