Caracas.-La ONG venezolana Provea denunció este domingo, con motivo del Día Internacional de la Democracia, que el Estado venezolano «abandonó abiertamente sus obligaciones» en materia de derechos económicos, sociales y culturales, y que ha habido, según la organización, una «sistemática violación de los derechos a la asociación, manifestación y expresión».
En Venezuela se ha impuesto el empeño gubernamental de consolidar un modelo económico divorciado de los intereses populares, sostenido por la corrupción, la opacidad y el favorecimiento de economías criminales de diversas procedencias». Así lo dijo la ONG en X.
A su juicio, la adopción de medidas «antipopulares y antidemocráticas» ha «erosionado la garantía de los derechos sociales y hace ilusoria la posibilidad de superar la crisis en el menor tiempo posible».
«La agudización de la crisis y la ausencia de respuestas para superarla obedece, fundamentalmente, al cierre de los espacios democráticos y la extinción del Estado de derecho», expresó Provea.
La organización no gubernamental advirtió que «negar» a las personas «el derecho humano a la democracia y al bienestar» y «reprimir a quien reclame estos principios básicos es un delito contra los DD.HH.».
Mensaje de Provea por el Día Internacional de la Democracia
Por tanto, agregó, «solo en democracia se podrá garantizar que las demandas de justicia y de igualdad de derechos para todas las personas puedan ser escuchadas».
El pasado jueves, un grupo de 49 países, más la Unión Europea (UE), firmaron una declaración conjunta en Naciones Unidas para pedir «restablecer las normas democráticas en Venezuela», aunque no incluyó un llamamiento concreto a la ONU para que intervenga en la crisis.
Los firmantes recuerdan que «es hora de que los venezolanos comiencen discusiones constructivas e inclusivas para resolver el ‘impasse’ electoral», en alusión a los comicios presidenciales del 28 de julio, cuyos resultados oficiales, que otorgan la victoria al mandatario Nicolás Maduro, no han sido reconocidos por gran parte de la comunidad internacional.
Asimismo, esos países se dicen «gravemente preocupados por las denuncias de violaciones a los derechos humanos».
Con información de EFE