El ministro de Relaciones Exteriores, Yván Gil, calificó este miércoles como engañosas las cifras del sistema de las Naciones Unidas en Venezuela, después de que la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, en inglés) informara que 3,5 millones de venezolanos recibieron ayuda humanitaria en 2024.
«Algunos burócratas del sistema de Naciones Unidas pretenden lavarle la cara a los corruptos que saquearon los fondos destinados a los venezolanos», aseguró Gil en su canal de Telegram.
Consideró que los datos anunciados son «engañosos» y buscan encubrir el «escándalo que está por estallar», en referencia al aporte de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), así como de otras agencias que – a su juicio- nunca llegaron realmente a quienes más lo necesitaban en el país.
«Ante la inminente caída del castillo de mentiras, sacan reportes inflados para fingir que hicieron algo. Lo que hubo fue una operación de corrupción y sabotaje, disfrazada de ‘ayuda humanitaria’», manifestó.
Gil afirmó, sin mayor explicación, que el dinero de la ayuda humanitaria terminó en «los bolsillos de los opositores, en cuentas bancarias en el exterior, en financiamiento para campañas mediáticas. Además de la organización de guarimbas, en la compra de armas y hasta en el suministro de drogas para alimentar la violencia en las calles».
Trump revisa eficacia de la Usaid
La sede de la Usaid en Washington cerró sus puertas y suspendió sus actividades, el hecho sucedió este mes después que el presidente Donald Trump aceptó desmantelarla, según anunció el magnate Elon Musk, responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental de EE UU.
Lo que comenzó como una medida temporal de 90 días para reducir el gasto público y la burocracia, reevaluar la eficacia de los programas y prevenir el posible uso indebido de los fondos, se ha transformado en una situación incierta para Usaid.
Según datos oficiales del gobierno de EE UU, en 2024 la Usaid distribuyó más de 44.000 millones de dólares en ayuda global. De esta suma, alrededor de 2.300 millones de dólares fueron dirigidos a iniciativas en Latinoamérica, representando un pilar fundamental para diversos programas.
El miércoles, el fiscal general venezolano, Tarek William Saab, propuso una cooperación con Washington para extraditar a los opositores —exiliados— Juan Guaidó y Carlos Vecchio, a quienes acusó de utilizar la parapolítica para enriquecerse de manera impune con fondos de la Usaid.
Con información de EFE