La Universidad Central de Venezuela —UCV—, la institución educativa superior más importante del país según el QS World University Rankings 2026, se plantea lograr una mayor autonomía económica para garantizar la sostenibilidad y funcionamiento de la casa de estudios.
Esto ante la crisis financiera que enfrenta la casa de estudios por la reducción progresiva y significativa de los recursos asignados por el Estado.
Un reportaje realizado por la Alianza Rebelde Investiga —una coalición editorial de los medios El Pitazo, Tal Cual y Runrunes— señala que desde 2008 hasta 2021 el presupuesto estatal destinado a las universidades públicas venezolanas se redujo en aproximadamente 6.800 millones de dólares.
La cifra supone una disminución que afecta directamente la infraestructura y los salarios del personal docente y administrativo. También incide en los beneficios para los estudiantes como becas y servicios de comedor.
Esa realidad, denunciada por representantes estudiantiles y académicos, se mantiene vigente con el presupuesto nacional aprobado para 2024. Apenas contempla un mínimo porcentaje de los fondos solicitados.
En este contexto, la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la UCV realizó una exposición en la que alertó que la institución depende cada vez más de los pagos de matrícula y otros aportes de los estudiantes, tanto de pregrado como de postgrado, para sostener su operatividad.
¿Qué alternativas se plantea la UCV para conseguir financiamiento?Víctor Rago, rector de la UCV, enfatizó que se debe impulsar un debate interno para explorar nuevas vías de financiamiento para alcanzar la autonomía económica.
Dos de las alternativas que se están considerando incluyen la búsqueda de recursos a través de organismos internacionales, como la Unión Europea, y el desarrollo de capacidades propias que permitan a la institución generar ingresos autónomos.
“Este proceso no es sencillo ni rápido. Implica una transformación institucional que debe involucrar a toda la comunidad universitaria”, afirmó el rector a la alianza. Subrayó que la autonomía económica no solo es una cuestión administrativa, sino que requiere un cambio cultural y estratégico. Así, indicó, la universidad puede mantener su misión académica y social en medio de las restricciones financieras.
Este planteamiento surge en paralelo con otras discusiones en la UCV, como la renovación curricular. Con ella se pretende repensar las carreras para responder de forma activa y propositiva a los cambios sociales y económicos del país.
El Nacional