Acarigua.- Qué maravilloso es contar buenas noticias de los jóvenes portugueseños que están triunfando en el mundo de los negocios, específicamente como activistas del desarrollo intelectual y la defensa de los derechos de autor a nivel internacional.
A eso se ha dedicado desde que se graduó de abogada Ana Virginia Salazar Ramírez, inicialmente a través de la empresa que dirigen sus padres y, ahora radicada en Estados Unidos, de su marca personal y su página www.anavsalazarr.com, como especialista en propiedad intelectual, conferencista, coautora del libro «Mujeres inspirando mujeres», con un capítulo titulado «Marcas que inspiran», además, formando parte del staf de Women Economic Forum, capítulo Venezuela (@wefvenezuela).
Por su destacada labor en la difusión de información que fortalece los emprendimientos, ideas, proyectos tangibles e intangibles y su propiedad intelectual, este último mes del año ha sido galardonada con el «Premio Mujeres Líderes de América 2022», otorgado por la Fundación Ciencias de la Documentación con sede en España y también como «Personalidad Líder 2022», en Estados Unidos, una organización que reúne alrededor de 125.000 mujeres profesionales, destacadas en diferentes ámbitos en más de 50 países.
Ana es abogada de la Universidad Arturo Michelena (Venezuela) con postgrado en propiedad intelectual en la Universidad de Los Andes (Venezuela), además de estudios en áreas como Legal Innovation and Technology (Universidad George Washington), máster en Business Law con equivalencia internacional, Legislación en Comercio Internacional y la certificación en Branding Gerencial del Valor de una Marca, entre otros postgrados, certificaciones y premios internacionales que reconocen su labor como empresaria y abogada especialista en activos intangibles. Es conferencista, autora y asesora a escala internacional.
De Guanare a Valencia
«Soy orgullasamente guanareña de nacimiento, aunque he vivido casi toda mi vida en Valencia. Viajaba constantemente a mi pueblo durante todas las vacaciones para reunirme con mis afectos, familiares y amigos. Allí, viví mis mejores momentos, fue el lugar donde conocí a mi esposo y donde me casé», dijo.
Al emigrar a Estados Unidos, dejó la comodidad de trabajar en la empresa familiar y ejercer el derecho, para dedicarse exclusivamente al cuidado de su familia por largo tiempo, viviendo a plenitud su maternidad.
Una mujer realizada
De mente inquieta y acostumbrada al desempeño profesional, se dedicó también a escribir contenido de valor y alto impacto para emprendedores, una actividad que ahora ha podido encausar y que se dispone a continuar formalmente.
«Yo considero plenamente posible, que una mujer pueda combinar y disfrutar todas las facetas de la vida: soy hija por encima de todo, esposa y madre a tiempo completo y hermana que hace presencia cuando la necesitan. Con disciplina, amor, constancia y sabiendo a dónde vas, todo es posible», expresó.
Actualmente, se desarrolla en un mundo jurídico multinacional, creando contenido en diferentes idiomas, rodeándose de un equipo que le ayuda a interpretar y traducir. Además, se ha formado internacionalmente como consultora de negocios y asesora de innovación y tecnología en el área jurídica.
«Yo crecí en un entorno laboral siempre dedicado a la defensa de la propiedad intelectual, a través de una empresa dedicada a la gestión de marcas, patentes y derechos de autor dentro y fuera de Venezuela», por lo que experiencia le sobra.
¿Qué es la propiedad intelectual?
Indicó que es muy importante conocer que desde el mismo momento en que se materializa una idea o se crea una obra, el autor tiene derechos sobre ellos. No es obligatorio registrarlo -aclara- pero es la única prueba formal emitida por un Estado.
La propiedad intelectual (PI) -explicó- es una rama del Derecho que protege todo lo que genera la mente humana y abarca tres aspectos: la marca, es decir el nombre y la imagen que representa un producto o servicio en el mercado. El derecho de autor que es inherente a la persona que crea una obra o pone en marcha una idea y la patente vinculada a todo lo innovador, aunado a los secretos empresariales que actúan como un registro de propiedad intelectual, aún cuando no exista un registro formal.
«Cada país tiene su propia legislación. Si se desea estar en varios países se debe acudir a convenios internacioales o ir registrando país por país. No basta con tener un registro mercantil, Instagram o dominio de web, porque estas son cosas distintas que no prueban la propiedad intelectual. En el caso de Venezuela se debe acudir al Servicio Autónomo de Propiedad Intelectual (SAPI)».
Galardón doble en 2022
Este año fue reconocida internacionalmente pero en Venezuela recibió los premios «Lo nuestro primero», como joven ejecutiva del año, y «Gaviota de oro de Venezuela».
Fue premiada como líder de América, por su marca personal (@anavsalazarr), en la que ha venido trabajando como proyecto educativo y social para decirle a la gente cuáles son sus derechos y cómo pueden proteger sus ideas.
«Este reconocimiento significa un compromiso enorme para representar a los venezolanos en el mundo, también una oportunidad mayor para poder compartir conocimientos, seguir creciendo y significa, también, que vamos por buen camino y que estamos haciendo la cosas de forma adecuada», enfatizó.
El éxito -declaró- es el resultado de la constancia, de seguir soñando y trabajando paso a paso por esa meta, desarrollando habilidades para que se cumplan y, además, vivirlo y disfrutarlo cuando todo el mundo diga que los has logrado.
Ana Virginia tiene muchos proyectos. No es para menos, ya que le sobra talento, preparación, carisma y determinación. Entre ellos, seguir impulsando los libros de desarrollo profesional para mujeres y continuar escribiendo. De igual manera, seguirá dictando conferencias, cursos on line y otros productos digitales de formación.
«Pero el proyecto más importante de mi vida es mi familia, recordar siempre de dónde vengo y honrar los principios y el ejemplo de mi familia guanareña, reconociendo que todo lo que yo logre en el mundo, está avalado por sus enseñanzas, sus oraciones y su amor».
Definitivamente, es una mujer que inspira, porque cada disertación y cada invitado en sus espacios digitales deja el deseo inmenso de seguir preparándonos, de aliarnos con los que saben y nos pueden ayudar, para seguir avanzando acertadamente y sin dudas hacia la consolidación de los proyectos de negocio y la realización vital.(CNP 16.100)