Acarigua.- Una de las comunicadoras que más brilla en la palestra pública, con luz propia y versatilidad, es Katiuska Carolina Pérez Mirás. Ella es periodista destacada, presentadora de espectáculos, se ha iniciado como escritora, va en ascenso con su marca personal y sigue proyectando hacia el futuro, porque es activa y creativa
Lo tuvo claro desde temprano. Quería estar dentro de la televisión como actriz y ya, más tarde, definitivamente, decidió ser periodista, seguir los pasos Anna Vaccarella y Valentina Quintero, con programa propio y una voz que hoy se escucha en múltiples formatos.
“De niña soñaba con ser actriz de televisión. Me aprendía los diálogos de las villanas y quería entender cómo era posible que las personas estuvieran dentro de esa ‘caja’ llamada televisor”, comentó.

Desde muy pequeña le gustaron los medios de comunicación.
Como buena periodista, se inició reportando desde la calle, los barrios y lugares más vulnerables, y dice que esa fue su gran escuela.
“Me dio destreza para desenvolverme con la gente y comprender todo tipo de realidades. El periodismo me enseñó que somos instrumentos y que nuestra voz es la herramienta de quienes no pueden hablar”, señaló.
Es egresada del Colegio los Ilustres de Acarigua, se tituló en la Universidad Fermín Toro de Barquisimeto, locutora acreditada por la Universidad Central de Venezuela y con un máster en Comunicación e Industrias Creativas de la Universidad de Santiago de Compostela, en Galicia. “Un año de estudios europeos que quedará por siempre en mi mente y en mi corazón”, añadió.
Recientemente, presentó su primer libro Me gradué de mamá, y ya tiene otros dos en proyecto.
La publicación fue presentada en la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBO 2025), donde Katiuska conectó con el público colombiano y descubrió una nueva faceta como conferencista. De la mano de su editorial Pan House, ha dictado charlas y conferencias sobre liderazgo femenino, marca personal y maternidad consciente, con títulos como: Resurgir de la mujer después de la maternidad, Luces y sombras de la maternidad y Tu historia también comunica: marca personal con voz propia.

Sigue promocionando su primer libro Me gradué de mamá.
Sus comienzos
Nació el 17 de abril de 1988, en Acarigua.
Creció entre el amor y la disciplina de su mamá y sus consentidores abuelos maternos, porque fue la abuela Victorina la compañera ideal de las tardes cálidas, la interlocutora de sus tertulias y la observadora de sus travesuras.
“Fui la luz de los ojos de mis abuelos maternos, gallegos exigentes que me amaron sin medida. También soy la consentida de mis tíos maternos, de quienes he recibido muchísimo amor”, dijo.
De sus padres ha aprendido la disciplina y organización, como hija única por parte de madre, impulsándola siempre a cumplir sus sueños. Por parte de padre, es la tercera de siete hermanos. “Aunque no me crié con él, ha sido una figura presente. Cree mucho en mí y en mi talento, y aunque es muy crítico, sé que lo hace para sacar lo mejor”.
Se inició profesionalmente en Barinas como reportera y la investigación, el trabajo comunitario y la cobertura de fuentes de seguridad, le dieron grandes satisfacciones.
“En 2011, obtuve el segundo lugar del Premio Regional de Periodismo, pero más allá de los reconocimientos, lo que me ha llenado es el calor de la gente: tomarme un café recién colado en cualquier parcelamiento campesino, almorzar pescado frito en caseríos o recibir racimos de topocho y plátano, como señal de gratitud de quienes me decían: ‘Gracias por contar nuestra historia’”.
Sin duda alguna, experiencias irrepetibles de quienes se van abriendo paso en las lides periodísticas. Posteriormente, Katiuska, como profesional joven y actualizada, ha desarrollado su potencial en las redes sociales con @elblogdekati y en la radio con su conocido programa, donde despliega su carisma y facilidad de palabra, una revista matutina en la que habla de diferentes tópicos, tiene invitados especiales, y secciones para informar y disfrutar.
Escribir para trascender
Comentó que escribir un libro siempre fue uno de sus grandes sueños, porque cuando estudiaba el máster en Galicia, España, vio como todos sus profesores tenían sus libros en la biblioteca y pensaba: “Yo también quiero escribir; quiero dejar un legado y trascender”. En ese momento no se planteaba la maternidad: era una joven soltera con muchos sueños profesionales.
“Luego, me casé en 2012 con mi novio de la adolescencia, nació mi primera hija y decidí pausar mi carrera para dedicarme 100 % a ser mamá. En medio de la lucha interna entre la Kati mujer y la Kati mamá, me sentí sola y un poco perdida. Entonces comencé a contar mi experiencia de maternidad, primero en Instagram y luego en un blog de WordPress. Esa comunicación —mi pasión— me permitió compartir lo que vivía desde mi experiencia, formar comunidad y crear una tribu, consolidando, con el paso del tiempo, una marca personal en torno a la maternidad.

Aquí con su madre, su esposo y sus amados hijos.
“Habían pasado casi diez años desde que me convertí en mamá, había atravesado un segundo embarazo en pandemia y sobrevivido a muchas pruebas. Entonces pensé: ‘Tienes mucho qué contar’”.Así nació “Me Gradué de Mamá”: no solo la historia contada desde las entrañas que concibieron a sus hijos, era la voz de la mamá, buscando volver a reencontrarse con la mujer.
Puso en las páginas su experiencia, desnudando su alma y desmitificando el papel de la mujer perfecta, creando un espejo de comprensión para que otras mamás pudieran saber que sus emociones son naturales, que no están solas —y dice— “si yo pude reinventarme, otras mujeres también pueden hacerlo”.
Escribir el libro le permitió mirarse por dentro, algunas veces con culpa y autocrítica, pero también con compasión.
“He aprendido a ser menos dura conmigo, a pedir ayuda cuando la necesito, a darme una palmada en el hombro, a recibir críticas con humildad y a repetirme siempre: ‘Un día a la vez’. No soy la mejor mamá ni la mejor mujer, pero cada día hago algo para ser la mejor versión de mí misma, la que necesitan mis hijos y mi familia”, afirmó.

Decidió comenzar El Blog de Kati, para sanar y contar su experiencia.
Escribir: terapia y placer
-Han sido años de práctica, de ensayo y error, de escribir y reescribir. Me encantaría concretar otro libro. La adolescencia de mi hija está tocando la puerta y sé que habrá mucho que transitar y contar. También tengo en mente una narración infantil, que me gustaría desarrollar junto a mis hijos.
Actualmente, se dedica a promocionar su libro, participado en ferias y eventos literarios de la mano de su editorial Pan House. Hace unos meses, tuvo el honor de presentar su libro en la FILBO 2025 en Bogotá.
“Fue maravilloso conectar con el público colombiano y dar a conocer mi historia, mi libro y mi marca personal”. Por otra parte, esta actividad le ha descubierto otra faceta y Pan House le ha abierto las puertas como conferencista.
“He tenido la oportunidad de dirigirme a públicos grandes y pequeños, y cada audiencia transmite una energía que me impulsa a seguir creciendo. Como periodistas podemos ser muy versátiles, debemos tener la capacidad de adaptar nuestro mensaje, dirigir la conversación y usar todas las herramientas que nos permitan estar vigentes; llegar a diferentes formatos y audiencias, sin sacrificar nuestros valores”, expresó.

También es imagen y voz de marcas y empresas reconocidas.
En su tiempo libre disfruta de planes tranquilos, un buen café y una buena conversación: “así —dijo—- puedo pasar horas”. Le gusta bailar y tiene pendiente tomar clases de salsa casino, para hacerlo profesionalmente, disfruta cocinando para su familia, sus dos hijos y su perrita Canela. “No es mi pasión, pero cuando lo hago, me queda muy bien”.
Tiene, además, un emprendimiento de ropa para niños llamado TikitiKo, inspirado en el apodo que le daba su madre, y trabaja en el fortalecimiento de su marca personal como embajadora de marcas, de valores y estilo de vida.
Katiuska Pérez Mirás es, sin duda, una comunicadora que trasciende formatos. Su voz no solo informa: inspira, conecta y deja huella. (CNP 16.100)