Orlando.- “Para mí, el momento más valioso del mundo empresarial es cuando, en tu negocio, no solo te va bien a ti, sino que transforma positivamente la vida de otros”. Con este pensamiento y propósito, Mariela Scovino Cordero, una joven venezolana que emigró a Estados Unidos, ha escrito su primer libro, “Latino: Resetea tus finanzas”.
Aunque en Venezuela siempre tuvo excelentes oportunidades, muy buena educación y hasta privilegios, como extranjera ha vivido la experiencia de perderlo todo y empezar desde cero —no solo en el aspecto material, sino y sobre todo, espiritual—, su reencuentro consigo misma y sus razones para vivir con ilusión. Hoy nos cuenta su historia.
También soy latina —dice a la comunidad hispana—, como muchos, llegué a Estados Unidos con ganas de salir adelante, pero sin una verdadera educación financiera. Trabajé duro, cometí errores, perdí dinero… y aprendí. Hoy, después de años de transformación personal y profesional, escribí este libro para ti.

Mariela con uno de sus mentores más importantes, el escritor y orador estadounidense John Maxwell.
“Este libro nace de mi historia, pero está escrito para la tuya. Muchos latinos seguimos atrapados en patrones financieros que heredamos: frases, creencias, miedos. Pensamos que solo necesitamos ganar más, cuando en realidad, lo que necesitamos es resetear nuestra mentalidad y aprender a administrar lo que ya tenemos con inteligencia. Aquí no vas a encontrar fórmulas mágicas, sino herramientas reales, ejercicios simples y reflexiones profundas que te ayudarán a construir una nueva relación con el dinero“. Así recomienda a sus lectores.
Sus sueños y metas, comentó, han cambiado mucho. Antes, estaban muy centrados en lo material, en alcanzar resultados visibles. Hoy, sin dejar de soñar en grande, lo más importante es convertirse en una persona cada vez más coherente con el tamaño de sus anhelos.
“Ser congruente no es algo que se dice, es algo que se construye todos los días, desde la intención, la conciencia y la acción. Y aunque me siento mucho más libre emocional y espiritualmente, hay un gran sueño que sigue latente: recobrar mi libertad geográfica. Por ahora no puedo salir del país, pero sueño con volver a Venezuela, abrazar a mi gente, caminar por mis calles, ver el Ávila, reencontrarme con mis tías, mis primos, mis amigos… Ese reencuentro lo anhelo profundamente”, agregó.
Acarigüeña de corazón
Mariela nació en Valencia, Venezuela, pasó parte de su juventud en Caracas, pero su corazón se quedó para siempre en el llano.
“Acarigua siempre fue parte de mi historia. Desde que nací, iba constantemente a visitar a mis abuelos maternos, Yuya y Waldemar Cordero, que vivían allí. Te juro que conocí al famoso cocodrilo del Parque Manonerio, un recuerdo que muchos acarigüeños comparten con cariño. Con el tiempo, Acarigua se convirtió en mi hogar por elección, el lugar donde inicié mi camino como emprendedora y donde dejé una parte grande de mi corazón”, afirmó.

Con su abuelo, el exgobernador y empresario portugueseño Waldemar Cordero Vale.
Su niñez y juventud fue muy feliz, rodeada de amor, estructura y vínculos muy presentes. No duda en asegurar que sus padres fueron los mejores del mundo.
“Mi papá, un hombre íntegro, trabajador, alegre, con valores innegociables como la honestidad y la responsabilidad. Y mi mamá, que hasta el día de hoy sigue siendo mi guía de sabiduría y amor ¡de esas que están de turno las 24 horas! También fui muy marcada por mis abuelos maternos, Waldemar Cordero y Yuya Casal, pasé muchísimo tiempo con ellos. Mi abuela Yuya fue ternura, paz, sabiduría, alegría. Su partida nos fracturó como familia; su ausencia marcó un antes y un después”, dijo.

“Mi papá, un hombre íntegro, trabajador, alegre”.
La autora de ‘Latino: Resetea tus finanzas’, es la menor de tres hermanos. Le anteceden Jorge y María Antonieta. “Mis hermanos mayores, siempre me cuidaron, me protegieron y me consintieron. Así que puedo decir, sin duda, que tuve una infancia y una adolescencia llena de amor y felicidad. Y luego la vida me regaló una hermanita menor, a quien amo profundamente: Isabela Scovino, hija de mi papá, Iván Scovino, y Graciela Bichoff”.

Con su madre Mariela Cordero, su amor incondicional y guía.
Sus inicios
Desde siempre le han gustado los negocios. Ya en primer grado vendía pitillos llenos de polvitos de colores en el colegio, “hasta que la directora le pidió a mi mamá que por favor me frenara. Desde entonces no he parado”, dijo entre risas.
Comenzó a trabajar a los 16 años en una tienda Benetton, en Caracas, y mientras realizaba estudios universitarios viajaba a Nueva York y Miami, para comprar ropa y revenderla en Venezuela.
“Siempre he sido emprendedora por naturaleza. Ya de adulta, cuando me mudé a Acarigua, probé muchos negocios: tiendas de ropa, puntos de café en universidades y hospitales, electrodomésticos, arepas, lotería, hasta que logré un gran acierto con una marca de pijamas para damas. Llegué a tener una red de más de 1100 vendedoras en todo el país, muchas de las cuales pudieron mejorar su calidad de vida gracias a ese emprendimiento. Para mí, eso es
lo más valioso del mundo empresarial: cuando tu negocio no solo te va bien a ti, sino que transforma positivamente la vida de otros”, expresó.
Lecciones de vida
Durante ese recorrido, comentó, ha aprendido que perder, no es un fracaso.
“A veces es una forma dura, pero poderosa, de despertar. Mis caídas me obligaron a mirar hacia adentro, a preguntarme por qué tomaba ciertas decisiones, qué patrones estaba repitiendo y qué vacíos intentaba llenar. También entendí que uno no puede construir abundancia afuera, si por dentro está fracturado. Por eso, antes de volver a emprender, tuve que reconstruirme emocional, espiritual y mentalmente“.

Mariela en tertulia con otro de sus maestros, Spencer Hoffman.
-Aprendí que las decisiones emocionales, sin estructura ni visión a largo plazo, tienen un alto costo. Y que el éxito verdadero no es solo cuánto logras, sino desde dónde lo haces y con quién lo compartes. Mis experiencias me enseñaron a respetar el proceso, a ser más paciente conmigo y a confiar más en Dios. Porque si sigo aquí, con propósito y con voz, es porque todo lo vivido tenía sentido, aunque en su momento doliera, señaló.
Rehacer la vida
Emigrar ha sido una de las experiencias más desafiantes y transformadoras de su vida. Dijo que no se trata solo de cambiar de país, es rehacer tu vida desde cero, emocional y financieramente; es dejar el lugar donde existía tu gente, tus códigos, tus raíces…y tener que reconstruirte, donde nadie te conoce.
“En mi caso, llegué a Estados Unidos, sin nada. Tuve que hacer trabajos que jamás imaginé: limpiar baños, manejar Uber, cargar mercancía de madrugada… ¡No me avergüenzo de eso! Fueron años de supervivencia, de mucho llanto, de preguntarme cómo, después de haber tenido tanto, había terminado allí. Y sin embargo, fue en ese fondo donde comencé a reencontrarme con mi propósito. Emigrar me enseñó humildad, resiliencia y fe. Me hizo más fuerte, más compasiva y más consciente del poder de reinventarse. Hoy agradezco cada parte del camino, porque sin esas heridas no estaría con el nivel de consciencia que hoy me hace ver la vida diferente”, reflexiona.
Por otra parte, tanto por trabajo como por placer viaja constantemente. “Viajar siempre ha sido una fuente profunda de inspiración para mí. Me permite desconectarme del ruido y reconectarme conmigo. Conocer otras culturas, ver otras formas de vivir, observar la belleza de lo simple… todo eso me ha abierto la mente y el corazón. Cada viaje ha sido también un encuentro conmigo misma desde otro lugar. Me enseña a soltar el control, a fluir, a agradecer”.
¿Qué hacer cuando no está resultando un negocio?, le preguntamos.
Lo primero es revisar los números con objetividad. Entender si el modelo es financieramente viable. Recomienda identificar “cuellos de botella” y evaluar si hay oportunidades reales de optimización.
-Pero esa es solo una parte del análisis. Lo más importante —y muchas veces lo más difícil— es revisarte a ti. Un negocio muchas veces refleja el estado interno de quien lo lidera. Tu energía, tu enfoque, tu liderazgo, tu claridad. No siempre se trata de estrategias externas, a veces la respuesta está dentro.
“Es fundamental preguntarte: ¿Estoy alineada con este proyecto?, ¿estoy sosteniéndolo desde la pasión o desde el miedo?, ¿es viable o me estoy aferrando a una idea que ya no tiene espacio para crecer?, reflexiona.
Indicó que discernir si un negocio necesita ajustes o si ha llegado el momento de cerrarlo requiere valentía. “No hay una sola fórmula, pero siempre empieza por hacerte responsable y mirar con honestidad tanto los números… como tu interior”.
-Además, he creado un programa especializado para agentes de seguros —sin importar con
quién trabajen—, donde los ayudo a tener un negocio con estructura, atraer a sus propios clientes y explicar productos financieros, incluso a personas que no conocen. Eso me tiene muy feliz, porque el impacto se multiplica: al empoderar a más agentes, más familias reciben la protección y educación financiera que tanto necesitamos, agregó.
Su libro
“Sí, acabo de lanzar mi primer libro ‘Latino: Resetea tus finanzas’. Es una guía clara, humana y directa para todas esas personas que sienten que el dinero se les va sin saber cómo, que viven con estrés financiero o simplemente nunca aprendieron a manejar sus finanzas personales de forma consciente”, añadió.
“No es un libro técnico ni lleno de fórmulas inalcanzables. Es un libro cercano, basado en mi historia”, dijo la autora.
Afirmó que este libro está escrito para la comunidad latina en Estados Unidos, especialmente para quienes han emigrado y sienten que el sistema financiero les queda grande o inaccesible. Pero también es para cualquier persona que quiera sanar su relación con el dinero, dejar de sobrevivir y comenzar a construir estabilidad con propósito.
“No es un libro técnico ni lleno de fórmulas inalcanzables. Es un libro cercano, basado en mi historia, en mis errores, en lo que tuve que desaprender… y en lo que hoy enseño desde la experiencia. Es un llamado a tomar responsabilidad, a dejar de postergar lo importante y a entender que sí es posible resetear tus finanzas —y tu vida— desde una nueva mentalidad”.
Lo puedes conseguir en Amazon, y en él hay tips sobre: Cómo romper con los saboteadores que frenan tu progreso, las bases que necesitas para lograr estabilidad financiera, estrategias para proteger a tu familia con decisiones inteligentes, cómo cambiar la historia que te contaste sobre el dinero y, lo más importante, cómo convertirte en la persona que sostiene la abundancia que sueñas.
Este no es solo un libro sobre finanzas. Es un llamado a despertar tu poder, a dejar atrás la improvisación y a construir, con conciencia, un futuro económico libre, estable y próspero.
Mariela explica su experiencia introspectiva para escribir el libro
“como volver a abrir páginas internas de mi vida que creía ya cerradas. Me obligó a mirar con honestidad, a recordar momentos de mucho dolor, pérdidas, decisiones equivocadas…pero también me permitió ver cuánto he sanado, cuánto he crecido y cómo todo tuvo sentido, al final”.
–Durante el proceso, me enfrenté al ‘síndrome del impostor’. Pensaba: “¿Cómo voy a ser autora de un libro si todavía no estoy donde sueño estar financieramente?”, pero entendí algo profundo: uno nunca se siente del todo listo para hacer cosas grandes. Siempre creemos que nos falta más, que debemos esperar un poco más.
“Uno de mis mentores me dijo algo que marcó mi camino: ‘A veces el libro que escribes es el que tú misma necesitas para seguir siendo coherente en tu andar y dejar de escribirlo sería negarle a alguien más la posibilidad de ser tocado por tu historia'”.
-Ese pensamiento me sostuvo. Hoy sé que todos estamos listos desde lo que somos y desde lo que tenemos, para atrevernos a dar lo que ya habita en nosotros.
Nuevos planes
Ella tiene como objetivo seguir apoyando a la comunidad latina a través de asesorías personalizadas, pero también está muy enfocada en hacer crecer su programa “Impact Agent”, una plataforma de formación integral para agentes de seguros.
“Mi visión es que se convierta en una comunidad de miles de agentes, donde cada uno se sienta dueño real de su negocio y tenga las herramientas para llegar a muchas más personas con productos que realmente transforman vidas. Además, tengo el firme propósito de dar conferencias y charlas llevando el mensaje de mi libro, porque creo que para transformar nuestras finanzas primero tenemos que transformar
nuestra mentalidad”.
-Este no es un mensaje solo para quienes están comenzando, sino también para empresarios, profesionales y personas que ya manejan dinero, pero sienten que pueden hacerlo de una manera más consciente y estratégica. Mi intención es llegar a toda la comunidad con una voz clara, real y transformadora, que ayude a cambiar desde las bases, aseguró.
Y muy firme, dijo: “Ya no se trata solo de lo que yo pueda lograr, sino de cuánto bien puedo contribuir a generar a través de otros. Eso es lo que hoy le da sentido a todo”. (CNP 16.100)