Guanare.- La comunidad educativa de la Escuela Nuestra Señora de Coromoto, en el caserío Barrancones de la parroquia Quebrada de la Virgen, en Guanare, amaneció sacando agua del plantel, este 21 de mayo.
«La institución tiene el techo como una coladera y, cada vez que llueve, se inunda», reveló una docente a Portuguesa Reporta. Se omite la identidad de la fuente por razones de seguridad expresamente alegadas.
La propia comunidad educativa grabó y difundió material audiovisual, denunciando esta emergencia que afecta a unos 210 alumnos de los turnos matutino y vespertino. En la escuela trabajan 33 docentes, 15 obreros y 6 cocineras. Hay cursos desde preescolar hasta sexto grado.
«Ya estamos cansados de solicitar ayuda oficial y de tantas mentiras del Gobierno«, dijo la maestra. Agregó que los daños de la planta física ocurren desde hace años.
«Eso tiene tiempo y una vez la visitó el alcalde Óscar Novoa, quien encargó al concejal Juan Marín y al de la junta comunal para levantar informe y proponer mejoras…y hasta ahí llegó el cuento. No salieron con nada», precisó la fuente.
La Escuela Nuestra Señora de Coromoto está muy deteriorada, ya que se trata de una institución vieja. «Ni siquiera fueron capaces de incluirla en el plan de las Brigadas Comunales Militares, las llamadas Brocomiles, impulsadas por el gobierno de Nicolás Maduro», informó Juan Puerta, vecino de Barrancones, el poblado aledaño al Santuario Nacional de la Virgen de Coromoto.
Las Brocomiles para la Educación y la Salud es un programa social creado en junio de 2022 por el Gobierno Bolivariano, donde participan efectivos de la Fuerza Armada Nacional.
En los videos difundidos por la comunidad educativa de la escuela de “Barrancones”, se observan torrenteras que inundan el comedor escolar. Además, se aprecia a docentes obreros y cocineras sacando el agua de la estructura o planta física.
«Cuando yo estudié, el comedor tenía buen espacio, pero lo quitaron para hacer la dirección y jamás se han ocupado de las mejoras. El llamado es para el gobernador Primitivo Cedeño, la autoridad de Educación y a los padrinos de Portuguesa, para que se ocupen: Los que sufren esta desidia son los niños. Tengan piedad», argumentó el vecino de Barrancones. (CNP 4.696)