Acarigua.- Pacientes de hemodiálisis de la Unidad de Diálisis, ubicada en Acarigua, piden a las autoridades gubernamentales respuestas ante el déficit de médicos especialistas para su atención, así como mejoras en las condiciones en que reciben el tratamiento diario.
José Alexis Narváez Tovar, presidente de la Asociación de Pacientes Renales del estado Portuguesa, expresó que desde julio de este año los pacientes esperan respuestas, ante la necesidad de médicos especialistas en la unidad de atención para el control y seguimiento a sus patologías.
Ya tenemos desde el mes de julio, que la administración de Seneca envió a Caracas, exactamente a Recursos Humanos, una solicitud de médico residente e, igualmente, de médico nefrólogo, expresó Narváez.
Los afectados hacen un llamado público al presidente de la República, Nicolás Maduro; a la ministra de salud, Magaly Gutiérrez y la jefa de hemodiálisis a nivel nacional, doctora Katerine Lugo. “Recuerde la necesidad de los pacientes de hemodiálisis, de contar con atención de los médicos especialistas. son indispensables”, subrayó.
En total, son 80 pacientes que se atienden semanalmente en la unidad y que tienen que lidiar con las condiciones de los sillones donde permanecen horas esperando recibir el tratamiento.
-En nombre de mis compañeros, también quiero hacer un llamado al gobernador Primitivo Cedeño y a la secretaria de Salud, para que nos cambien los sillones y nos faciliten nuevas máquinas. Nosotros contamos con varias máquinas, pero están demasiado deterioradas por los años de funcionamiento; ya dieron el todo, señaló.
Indicó que en otros centros de atención a pacientes de diálisis como La Coromotana le enviaron máquinas nuevas, al igual que al hospital JM Casal Ramos. «Nosotros también somos hijos de Dios y somos pacientes renales. Entonces, el apoyo que necesitamos de ustedes es que nos envíen las máquinas».
Narváez también reiteró la necesidad de sillas donde les hacen las hemodiálisis, las cuales «están totalmente deterioradas; ya nos duele la espalda y todo. Cuando nos acostamos allí, se caen los pasamanos. Eso legalmente ya no sirve».
Reconoció que en un 40 % se han atendido las necesidades de la unidad, adscrito al Instituto Venezolano de Seguridad Social, con labores de pintura, mejoras en el techo y el arreglo de unas seis sillas, de las cuales tienen un déficit de 19.
Protestas
Cabe destacar que, en el momento que se atendió la denuncia de los pacientes, se fue la electricidad, razón por la cual piden un generador que pueda funcionar mientras reciben tratamiento. «Cada vez que se va la luz, se atrasa todo. Aquí hay personas de otros municipios como Turén y Esteller», expresó Narváez.
Los pacientes amenazan con protestas de calle de no tener pronta solución, ante el riesgo de que empeoren sus condiciones de salud. (CNP 13.114)