El Servicio Meteorológico Nacional (NWS por sus siglas en inglés) advirtió este lunes 21 de agosto sobre la posibilidad de “inundaciones repentinas, incluyendo deslaves, aludes de lodos y flujos de escombros” en distintas localidades del sur de Estados Unidos. La tormenta tropical Hilary continúa su camino desde México hacia el noroeste, lanzando alertas y movilizando recursos federales para responder al desastre. El domingo fue el día más húmedo en San Diego, rompiendo el récord de 1977.
En Palm Springs, ciudad turística en el desierto de Sonora al sur del estado de California, se observan calles inundadas y ríos de escombros. Los servicios de rescate han tenido que intervenir para salvar a varias personas de las fuertes corrientes provocadas por la Tormenta Hilary, que llegó a Estados Unidos el domingo 20 de agosto por la noche, y continúa su camino hacia el noroeste.
“Ahora todas nuestras calles están inundadas. No hay forma de entrar o salir de Palm Springs, y es el caso de la mayoría del valle de Coachella. Estamos atrapados”, dijo la alcaldesa Grace Garner, alertando que la tormenta había cortado la línea de emergencia estadounidense, el 911. La Policía de la ciudad indicó que aún se podían enviar mensajes de texto, o que era preferible dirigirse a la estación de policía o de bomberos más cercana.
El fenómeno natural Hilary desató aguaceros récord durante la noche, las fuertes lluvias en múltiples áreas del sur de Estados Unidos se han mantenido a lo largo del lunes. Además, 17 millones de personas se encuentran bajo alerta de inundaciones y fuertes vientos.
El gobernador de California, Gavin Newsom, ya había declarado el estado de emergencia, ante la primera tormenta tropical jamás registrada en San Diego, y la primera en Los Ángeles desde 1939.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS por sus siglas en inglés) alertó desde Los Ángeles que algunas de las áreas montañosas y desérticas podrían presenciar acumulaciones de lluvia de entre 12 y 25 centímetros, algunas zonas montañosas ya fueron testigo de precipitaciones de 15,24 centímetros. Hilary podría provocar la misma cantidad de precipitaciones en unos días que lo que el desierto recibe en un año entero.
“Por favor, manténgase fuera de las calles”, publicó el NWS en X.
Existe la posibilidad de que la tormenta tropical desate inundaciones repentinas, deslaves, fuertes ráfagas, cortes de electricidad e incluso, tornados aislados. El presidente Joe Biden ordenó movilizar recursos federales para responder a la emergencia, enviando servicios de rescate y suministros a la región.
Antes de tocar tierra, el fenómeno natural Hilary era un huracán de categoría 4. Degradado a tormenta tropical por el Centro Nacional de Huracanes en Miami, las autoridades advirtieron el lunes que aún se esperan “continuas inundaciones, potencialmente mortales y localmente catastróficas”.
En San Diego, el equipo de bomberos rescató a 13 personas de la calle y tuvo que sacar el agua de la sala de emergencias del Centro Médico Eisenhower en Rancho Mirage, otra ciudad del estado de California.
¿Cuáles son las medidas de prevención?
Las autoridades han hecho un llamado a no bajar la guardia, pues las fuertes precipitaciones han provocado que lodo y también que grandes rocas se esparzan por la carretera. Además, alertaron que puede haber caídas de árboles que bloqueen las rutas y causen daños a la infraestructura.
La Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés) anunció que dispuso oficiales en el servicio de emergencias del estado de California, además de un equipo preparado con comida, agua y otras eventuales formas de ayuda.
Hacia el norte, en el estado de Nevada, el gobernador Joe Lombardo también declaró el estado de emergencia, desplegando a 100 miembros de la Guarda Nacional para asistir con las consecuencias anticipadas de las inundaciones. En Arizona, los vientos han alcanzado velocidades de 97 kilómetros por hora y las autoridades han colocado miles de bolsas de arena para ralentizarlos.
En San Diego las escuelas cerraron y el regreso a clases se fijó para el martes 22 de agosto. “No hay forma en la que podamos comprometer la seguridad de un solo niño o empleado”, declaró el superintendente Alberto Carvalho.
Antes de llegar a Estados Unidos, la tormenta tropical Hilary pasó por el noroeste de México, causando la muerte de una persona. El domingo, además del inicio de la tormenta, el sur de California experimentó un temblor de magnitud 5,1.
Hilary podría provocar las lluvias del siglo en otros estados del oeste de Estados Unidos, con altas probabilidades de convertirse en el ciclón tropical más húmedo conocido en la región. Hace 84 años, una tormenta tropical en California destrozó vías de tren, volcó barcos y arrancó casas de sus cimientos, provocando la muerte de casi 100 personas en la tierra y en el mar.
La tormenta tropical es el más reciente desastre natural en azotar América del Norte, tras los incendios forestales en Canadá y Hawái.
Con Reuters y AP