Acarigua.- En un hermoso encuentro mariano de renovación de fe, se constituyó el programa central preparado por la Diócesis de Acarigua-Araure, para honrar a la santa patrona Virgen de la Corteza, a los 321 años de su aparición, coincidiendo con el vigésimo aniversario de esta Diócesis, que ocupa el cono norte de Portuguesa.
La festividad inició con una procesión, presidida por monseñor Gerardo Salas Arjona, obispo de Acarigua y Araure, acompañado por parte del clero diocesano, movimientos, pastorales y feligreses, quienes acompañaron la reliquia desde la iglesia San Miguel hasta parroquia Catedral, luego de 19 años.
Correspondió al obispo presidir la misa pontifical concelebrada y, en este marco, a manera de saludo expresó: «Brille la luz de ustedes delante de los demás», haciendo alusión al evangelio de Mateo de la pasada semana, que invita a ser “sal en la tierra y luz del mundo».
Para el obispo, se constituye la festividad en una hermosa ocasión para seguir fortaleciéndose y respondiendo como iglesia al llamado de Dios, a modo de continuar en el camino misionero y testimonial de llevar a la práctica el evangelio.
Su llamado a la Diócesis fue a descubrir las cosas buenas de cada uno y ponerlas en práctica, dejar atrás todo lo incipido de sus vidas, guiar a un verdadero encuentro con Jesucristo y ser mejores cristianos, con espíritu evangelizador y mayor discernimiento, a tono con los tiempos modernos que guían a la iglesia a mostrar un rostro misionero, carcano y samaritano.
Orientó, asimismo, en su homilía a seguir las enseñanzas de María cuando en las bodas de Canán ordenó: «Hagan lo que Él les diga» .
“Sigamos adelante, en el camino de la sinodalidad, porque es el camino de la iglesia del tercer milenio, tal como lo promueve el papa Francisco”, afirmó.
Su llamado fue a caminar juntos, como pueblo de Dios, en permanente conversión, ya que «solo si caminamos en presencia de Dios, podremos caminar en esperanza».
La santa misa dio paso a un acto de condecoraciones por parte de la Sociedad y Amigos de la Corteza, siendo condecorados monseñor Salas Arjona, junto a un grupo de sacerdotes y miembros de la sociedad civil.
Vía: Prensa Catedral, Mayami Alvarado (CNP 4.755)