Araure.- Nuevamente salieron a la calle para hacer oír su voz de protesta, los diferentes gremios de profesionales liderados por el Colegio de Enfermería del estado Portuguesa, unidos ante la situación adversa de salud, laboral y de derechos humanos a la que tienen que enfrentarse a diario.
Acompañada de los docentes, del Comité de Derechos Humanos, representantes de los adultos mayores, personal activo y jubilado, la presidenta del gremio de enfermería, Ana María Velázquez, expresó este miércoles 30 de julio, que a los trabajadores del Hospital Universitario «JM Casal Ramos», se les está criminalizando, reduciendo los salarios y suprimiendo la evaluación de desempeñando, e ignorando los años de antiguedad, convirtiéndolos en víctimas de la miseria.
«La Onapre nos está llevando a la pobreza extrema. Un profesional de la salud que tenía un ingreso 60 % del salario mínimo hoy recibe solo el 30 %. Actualmente, cualquier profesional de la administración pública tiene que acudir a la colaboración pública para poder enfrentar una enfermedad, aunque se encuentre en este hospital», explicó.
«Gobernador, no hay insumos»
Asimismo, reconociendo las mejores estructurales en algunas áreas del centro
de salud de Acarigua-Araure, recalcó que no hay que dejar de denunciar la falta de insumos ni medicamentos para que el personal de salud pueda atender debidamente a los pacientes.
“Hay un incremento de enfermeras contagiadas porque no hay ni siquiera tapabocas y que se han venido complicando, por la deficiencia del tratamiento», dijo.
En ese sentido, exigieron al gobernador Primitivo Cedeño seguir el ejemplo de su par en el estado Bolivar, que está otorgando a los trabajadores de la salud 100 dólares mensuales y una bolsa de comida.
Recalcó que éste es un beneficio que debe llegar a todos los empleados públicos, cuya economía se ve mermada cada día más.
Recordó, además, la deuda que tiene el Estado con aquellos trabajadores que se han profesionalizado pero que siguen como obreros. Asimismo, indicó que tienen una sobrecarga laboral porque una sola enfermera debe atender de quince a veinte pacientes, cuando para poder dar cuidados adecuados no deben ser más de cuatro.
Acotó que hay un gran déficit de enfermeras en el estado Portuguesa, tanto por bajos salarios, como por hostigamiento por parte del ente patronal que los obliga a cumplir funciones que no les corresponde, no les ha dotado de zapatos, ni entregado los bonos para jubilados, primas y otras bonificaciones contractuales.
«A pesar de haber llevado los documentos petitorios a la Dirección Regional de Salud, Defensoría del Pueblo y a la Fiscalía del Ministerio Público, este gremio no ha recibido respuesta de ninguna de las instancias a las que ha acudido”, afirmó.
Velázquez indicó que seguirán en la calle, en esta protesta que se realiza en todo el país, hasta lograr una respuesta positiva tanto del Gobierno regional como nacional. (CNP: 16.100)