El cerebro, encargado del 20% del consumo energético del organismo, necesita nutrientes particulares para preservar su salud y desempeño. Una alimentación balanceada no solo favorece al organismo, sino que también resguarda y potencia las habilidades cognitivas. A continuación, mostramos diez comidas comprobadas científicamente para potenciar la función cerebral.
1. El pescado azul: «El software» de las neuronas.
Pescados abundantes en ácidos grasos omega-3 (DHA y EPA), tales como salmón, caballa y sardinas, son esenciales para la creación de células cerebrales y la disminución de inflamaciones. Estos ácidos grasos constituyen las bases de las membranas neuronales, fundamentales desde la etapa intrauterina para la formación de los circuitos de visión, coordinación y sentimientos.
Los omega-3 constituyen aproximadamente el 35 % de los lípidos en el cerebro, lo que contribuye a mejorar la memoria, el flujo sanguíneo y la cognición. Diversos estudios han demostrado que su consumo es beneficioso para personas de todas las edades, especialmente para los adultos mayores, ya que ayuda a ralentizar el deterioro cognitivo.
2. Nueces: El cerebro vegetal con superpoderes
El consumo diario de un puñado de nueces (50 g), debido a su mezcla de omega-3, proteínas y antioxidantes, potencia los tiempos de respuesta y la memoria. Su aspecto increíblemente parecido al cerebro humano parece un mensaje de la naturaleza. La Universidad de Reading determinó que su incorporación en el desayuno mejora el desempeño en actividades mentales complejas, además de controlar la glucosa y los ácidos grasos en la sangre.
3. Arándanos: los defensores de la memoria
Los flavonoides presentes en los arándanos funcionan como protecciones neuronales, contrarrestan el estrés oxidativo que provoca la vejez cerebral y potencian la memoria. Estos elementos también controlan el flujo de sangre en el cerebro y disminuyen la probabilidad de padecer enfermedades como Alzheimer y Parkinson.
4. Chocolate negro: el «elixir de la concentración»
Los polifenoles y la cafeína en el chocolate negro aumentan el flujo sanguíneo cerebral, mejorando la concentración y reduciendo la fatiga mental. Un estudio con 18 participantes mostró que incluso una sola ingesta permite mantener el rendimiento en tareas cognitivas exigentes.
5. Tomates: la ‘desintoxicación’ del cerebro que lucha contra la depresión.
El licopeno, sustancia que otorga su tono rojo a las neuronas, potencia la comunicación entre ellas y mitiga los síntomas de depresión. Como antioxidante, brinda protección frente a radicales libres asociados al alzhéimer. Además, su elevado nivel de vitamina C contribuye a la salud del cerebro durante la etapa de envejecimiento.
6. Café: un «impacto inmediato»
Es una de las bebidas más consumidas a nivel global, con miles de millones de individuos apreciando su fragancia y sus propiedades revitalizantes cada día. Además de su relevancia cultural, el café ha sido estudiado por su potencial impacto en funciones cognitivas como la memoria, la concentración y la gestión ejecutivo.
7. Té verde: la «poción zen» para la mente
La combinación de cafeína y L-teanina del té verde ayuda a disminuir la ansiedad y a potenciar la atención y la memoria de trabajo. Investigaciones han demostrado que esta mezcla activa áreas del cerebro relacionadas con el procesamiento cognitivo. Además, el té verde es efectivo para combatir el estrés y reducir la tensión.
8. Aceite de oliva: un escudo para tu cerebro
Rico en antioxidantes, el aceite de oliva virgen extra fortalece la barrera hematoencefálica y mejora la conectividad cerebral. Un estudio determinó que su consumo diario durante seis meses beneficia a personas con deterioro cognitivo leve y altera biomarcadores de alzhéimer.
9. Espinacas y brócoli: el «ejército verde» contra el olvido
La luteína, folato y vitamina K presentes en estas verduras protegen contra el declive cognitivo. Un análisis reveló que una porción diaria reduce el deterioro mental en ancianos, destacando su papel en la prevención de demencias.
10. Cúrcuma: el renovador neuronal dorado
Un estudio de investigadores de UCLA encontró que consumir diariamente una forma específica de curcumina —la sustancia dorada que le da color a los curris indios— mejoró la memoria y el estado de ánimo en personas con pérdida de memoria leve relacionada con la edad.
Su compuesto activo promueve la creación de nuevas neuronas y combate la inflamación cerebral, siendo clave en la prevención de enfermedades neurodegenerativas. La investigación sugiere que la curcumina puede ayudar a mejorar la memoria y estimular el crecimiento de nuevas células cerebrales.
Con información de RT.