«Hay 500 millones de vapeadores en el mundo y más cantidad de fumadores. Los niños comienzan a vapear a los 12 o 13 años por ser la moda y por probar los sabores del vaper. Estos vapers o cigarrillos electrónicos se vendieron con la idea de dejar de fumar y salvar vidas. Su uso creció vertiginosamente. No hay regulación específica, se compran por internet y hay delivery libremente», advierte Teolinda Mendoza, otorrinolaringóloga del Instituto de Otorrinolaringología de San Bernardino.
Expertos han elevado la preocupación ante el incremento del uso de los llamados vapers o cigarrillos electrónicos, unos dispositivos electrónicos de pila compuestos por cartuchos que tienen líquidos de diferentes sabores, nicotina y otras sustancias que pueden ser vaporizadas.
Hay muchos aromas y especificaciones que poseen estos dispositivos que se han vuelto un sustituto del cigarro convencional. Además, hay algunos que no tienen ningún porcentaje de nicotina, por lo que solo generará efecto placebo en la persona.
También hay los que contienen partículas de nicotina, glicerol, dietilenglicol, propilenglicol, nitrosaminas, partículas PM, cromo y níquel, entre otros. Todos estos componentes son tóxicos a corto plazo para el sistema respiratorio y cancerígenos a largo plazo.
Alerta la especialista que las personas que usan vapers lo hacen para consumir droga, lo que se está viendo en los últimos años.
«Son vapores y aerosoles que contienen sustancias peligrosas. Los cigarrillos normales tienen en su composición tres tipos de tabaco y cuatro mil componentes dañinos a la salud cancerígenos como el alquitrán. Los cigarrillos electrónicos también tienen varios componentes. Nicotina en concentraciones variadas, saborizantes, colorantes y ahora le incluyen otras drogas», señala la doctora.
Algo que resulta alarmante si se considera que la mayor proporción de vapeadores son adolescentes, estudiantes de secundaria y 74% menores de 30 años.
«El cigarrillo electrónico se está utilizando para drogarse en la población de adolescentes y adultos jóvenes ya que tiene un dispositivo que tiene líquido y se le puede colocar, nicotina, cannabis, drogas sintéticas a diversas concentraciones. Así como colorantes y saborizantes que son muy irritantes y dañinos para la vías respiratorias. Las personas delante de usted pueden estar consumiendo cannabis y no se nota por los aromas que se la pueden agregar al cigarrillo electrónico,
También agregó que el daño es múltiple en el organismo, con predominio en la vía respiratoria, donde incide más a nivel pulmonar, y también puede ocasionar problemas gastrointestinales, endocrinológicos, del sistema nervioso central, cardiovasculares e incluso problemas embriológicos.
La doctora apunta a que más allá de una solución para dejar de fumar, el vaper perjudica la salud, no solo a nivel pulmonar. Tiene efectos negativos en las células del sistema inmunológico y produce inflamación de las mismas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), también dejó en entredicho su buena función, explicando que en realidad su uso no desaparece ni elimina el hábito del cigarrillo.
Entre los efectos dañinos que produce en el cuerpo se encuentran las convulsiones, problemas psicóticos, retraso del desarrollo del cerebro en especial lóbulos frontales, produce déficit de atención, hiperactividad, comportamiento impulsivo y trastornos de conducta.
Los problemas gastrointestinales también están a la orden del día, afectando a la flora intestinal. Asimismo también afecta la salud reproductiva. En los hombres disminuye la producción de testosterona y en las mujeres, durante el embarazo, habrá mayor riesgo de malformaciones congénitas.
Fuente ElUniversal.com
