Acarigua.- La primera consulta de los padres para revisar la futura dentición de su hijo alrededor de los seis meses, es absolutamente necesaria para que el bebé tenga dientes sanos.
Así lo explica la odontóloga portugueseña Michelle Pantoja, indicando que la mayoría de los niños que llegan a la consulta entre 2 y 3 años, ya tienen caries, algo que se puede evitar con una buena higiene, desde que son bebés.
«El lapso de tiempo entre el nacimiento y los primera dentición es corto y más corto aún es el período en que puede desarrollarse una caries», indicó.
Existen muchos mitos alrededor de la erupción de los primeros dientes y los padres deben buscar información con su pediatra o su odontopediatra. Por ejemplo, las fiebres asociadas, que no tienen que ver directamente con el diente en proceso de erupción sino con los objetos que el niño se lleva a la boca para aliviar su molestia.
No hay salud si tienes caries
Las encias del bebé deben ser limpiadas cada vez que el niño coma, con una gasa humeda o dedal de silicón, sobre todo antes de dormir, para ir adaptándolo al correcto cepillado.
La caries tiene etapas de evolución. La primera es una mancha blanca o lesión primaria que puede ser revertida. En la odontología actual no se repara a menos que haya una cavitación. Las oscuras pueden necesitar restauración.
La salud dental es tan importante que la bacteria que se alojan en la cavidad bucal, es el estreptococo, la misma que causa la endocarditis bacteriana, por eso -dijo- el cepillado dental debe hacerse cada vez que se come, aunque este por sí solo no basta, porque hay espacios donde se une un diente con otro, en los que hace falta usar hilo dental y enjuague bucal.
Más complicado es la higiene en niños, por su alto consumo de carbohidratos que, si el aseo no es correcto, dañan la dentadura y es el mayor causante de caries de la primera infancia.
En los bebés ocurre que duerme con el tetero en la boca, al estar 8 horas con la boca cerrada no se produce el proceso de mineralización y remineralización, que se hace a través de la saliva nueva durante todo el día. Por eso hay que evitarlo.
«Los niños que van a la consulta de 3 a 4 años, llegan ya con muchas caries, son pacientes que ya ameritan extraccion, endodoncia o cirugía. Generalmente los padres no tienen el hábito de revisar la boca de sus hijos, es el dolor la señal de alarma.
Las consultas -alertó Pantoja- deben hacerse por prevención y no para restauración porque los dientes de leche cumplen la funcion de guía del diente permanente. Si no está o está tan dañado, se corre el riesgo que el nuevo diente quede impactado en el hueso o venga con caries.
Durante su paso por la administración pública, pudo constatar que es absolutamente necesario una mayor educación acerca de los protocolos a seguir en cuanto a la higiene y que el bebé debe ser llevado al odontólogo tal como se lleva al pediatra, señaló.
Para eso, deben existir más consultas populares o gratuitas, porque los costos de esta especialidad son sumamente altos, debido a que los materiales son importados. Por otro lado se usa mucho material descartable, lo que incrementa su valor. (CNP: 16.100)