¡No hay delito! ¡No hay delito!», gritaban este miércoles, 26 de julio, a las puertas de una corte de Venezuela activistas y familiares de 33 hombres detenidos en un local privado de la comunidad LGBTIQ+.
Las detenciones ocurrieron la tarde del domingo en la ciudad de Valencia (estado Carabobo, centro). La prensa local publicó que se produjeron durante una redada policial por una «fiesta sexual», situación que condenan activistas, que denuncian «persecución» y «criminalización de la homosexualidad» en este caso.
Las autoridades no se han pronunciado.
«(Siento) impotencia, dolor (…), uno pregunta y se burlan de nosotros, pasan por encima de nuestro dolor, necesitamos que alguien tome cartas en el asunto», dijo a la AFP Ambar Cuevas, de 40 años, tía de uno de los arrestados. «Barrieron el suelo con ellos».
La audiencia de presentación en el tribunal estaba prevista para el martes, pero fue pospuesta cerca de la medianoche.
Y este miércoles, a mediados de la tarde, aún no se había realizado aunque estaba pautada para la mañana.
«No sabemos qué puede pasar, no tenemos información de nada, ¡ya esto es una burla!», lamentó Vilma Vargas, ama de casa de 47 años, familiar de otro de los detenidos.
Abogados alertan que los arrestados serían imputados por el delito de «ultraje al pudor», referido a actos obscenos en público, que conlleva penas de 3 a 15 meses de prisión. Niegan que ello ocurriese y sostienen, además, que la redada se hizo sin orden de allanamiento, por lo que exigen la libertad plena de los 33 hombres.
«Liberen a los 33. Basta con la homofobia», se lee en una pancarta.
«Fueron detenidos ilegalmente en un recinto privado (…), violando todos sus derechos», cuestiona el activista Eduardo Franco. «No hay ningún tipo de delito».
Fotografías que muestran teléfonos, condones y las identificaciones de los detenidos circularon en redes sociales.
«Fueron expuestas caras y nombres», criticó Franco. «Eso es un delito y es una violación de derechos humanos».
En Venezuela, la comunidad LGBTIQ+ lleva años luchando contra la discriminación, sin que la ley les otorgue derechos como el matrimonio igualitario o el cambio de la identidad de género.
AFP