(24-2-2025).- En la madrugada de este 24 de febrero, falleció a los 99 años de edad, doña Marta Guerra de Oliva, viuda del siempre recordado don Juan Francisco Oliva, quien fuera presidente de Asoportuguesa y uno de los líderes con mayor influencia dentro de la agricultura contemporánea.
Doña Marta de los Dolores Guerra Quiñones nació en Cuba, el 1 de octubre de 1925, pero vivió en Venezuela desde mediados de la década de los 50, junto a su madre y sus tres hijos, para acompañar a su esposo, quien había emigrado antes, buscando un mejor destino para él y su familia.
Doña Marta y don Juan, un legado familiar que trasciende
Acompañó a don Juan durante el proceso de cambio y crecimiento que su esposo lideró en Asoportuguesa. Más de 60 años de unión matrimonial, seis nietos, una docena de bisnietos y buenas amistades, entre productores, personas vinculadas al sector y trabajadores de distintas generaciones que se le acercaban con cariño, admiración y respeto.
En julio del año pasado, en nuestro segmento de Nuestra Gente —que se le dedicó al estar cerca de cumplir cien años de vida—, doña Marta contó que asistiría a votar en las elecciones presidenciales: “Venezuela es mi patria. Llegué aquí, si mal no recuerdo, en 1956, con mis tres hijos pequeños. Aquí he realizado mi vida y pedí ir a votar para cumplir con mi deber ciudadano, y pido para Cuba y Venezuela, la libertad. Debemos seguir trabajando por la familia”, dijo en aquel momento.
Hace casi dos años, también asistió al homenaje póstumo que la directiva de Fedecámaras Portuguesa dedicó a Juan Francisco Oliva, escuchando el testimonio de dirigentes que lo acompañaron y muy emocionada al momento de la develación del retrato del recordado líder gremial y expresidente de esta institución.
Doña Marta Guerra de Oliva, en la plenitud de su juventud
El sector agrícola de Portuguesa lamenta la partida física de quien fuera un ejemplo de amor por la vida y la familia, reconociendo su valor como persona, su bondad y generosidad con el prójimo, y su temple para sobreponerse a momentos tan difíciles en la vida, como la pérdida de su amada hija Marta y su esposo, don Juan.
Sus restos serán cremados en la mañana de este martes, 29 de febrero, en el Jardín Metropolitano de Araure.
Desde Portuguesa Reporta extendemos nuestras sentidas condolencias a la familia y oramos por el descanso eterno de una persona tan querida como doña Marta. (CNP 18.867)
