Acarigua.- La errática venta de la cosecha nacional de maíz del ciclo invierno 2022, mantiene preocupados a los agricultores del país, cuando en algunas localidades de Portuguesa y Barinas, se inició con la siembra del cereal y, en paralelo, continúan las importaciones del rubro.
Históricamente, Venezuela recibe maíz blanco y amarillo de otros países, pero específicamente en los últimos tres años, entre los meses de mayo y agosto, importa un estimado de 25.000 toneladas provenientes de Estados Unidos, lo que no es recomendable para avanzar con la producción nacional.
Así considera el dirigente Ramón Elias Bolotin, directivo de Fedeagro, al asegurar que no debe existir importaciones previo y durante la cosecha nacional y mientras se garantice la venta del maíz de los agricultores a la industria. “Venezuela es deficitaria de maíz en un 50 % y es normal que todos los meses se importe materia prima, principalmente fuera de época de cosecha«, dijo.
Ante esto, Bolotin considera que el Estado debe impulsar una política gubernamental que privilegie la comercialización del maíz nacional frente al importado.
«Hay cosecha nacional que todavía no se ha terminado de vender y, paralelamente, están viniendo buques importados y eso no es sano para el campo venezolano. No debería otorgarse licencia de importación hasta que no se venda el último grano de cosecha nacional», dijo Bolotin en una entrevista al portal Minuta Agropecuaria.
No tiene sentido -continuó- estar importando maíz cuando hay producto nacional almacenado. «Estamos activando la economía en otras regiones, en vez de activarla en nuestro país”, rechazó.
La siembra de maiz ya inició en algunas zonas, donde los suelos acumulan más de 90 milímetros de precipitaciones, pero el «panorama es poco alentador para el ciclo que viene. La cotizacion del maíz ha estado cayendo a nivel mundial y creemos que no habrá buenos precios para la cosecha que viene». (CNP 18.050)